domingo, 31 de agosto de 2014

QUE DULCE ARMONÍA

"¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus vestiduras; Como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna" 
(Salmos 133:1-3 RVR1960)

Unas de las bendiciones más ricas que Dios nos ha regalado es darnos una familia espiritual, muchos hermanos que al igual que tu fueron lavados por la sangre de Jesús y que están a tu lado para acompañarte, apoyarte, y para ir juntos en cada conquista, no somos simples feligreses o asistentes a una reunión, somos una familia y que hermoso es sentir esa unidad con tus amigos y hermanos en la fe; David lo califica como "delicioso".
Pero la "delicia" no sólo viene cuando estamos juntos, sino cuando estamos en armonía, y la idea que me sugiere esto es como si cada uno de nosotros fuese una nota musical en particular y cuando nos juntamos, todas esas notas dan una melodía armoniosa, agradable y que trae fuerzas y paz.
Esa armonía sólo la puede producir la verdadera unidad, cuando Dios une nuestras vidas en un solo corazón, un sólo propósito, cuando el amor de Dios fluye a través de nuestras vidas. Esa unidad es indispensable en nuestro crecimiento personal, pero además en la conquista de todas nuestras metas.

David compara esa unidad armoniosa a dos cosas:
Primero: El óleo sobre la cabeza. Sólo los reyes, sacerdotes y profetas eran ungidos con aceite sobre la cabeza, esto era un símbolo de la unción del Espíritu Santo. Ese aceite refrescaba sus vidas, traía un gozo supremo y la convicción de que Dios estaba con ellos y podrían  realizar la misión que recibían. El salmista compara la delicia de esa unción, con la delicia de la unidad, 
Segundo: El Rocío de hermon. Que agradable es sentir la brisa sobre el rostro, o cuando caen esas gotas finitas de agua sobre tu cara, yo por ejemplo levanto mis manos y disfruto ese momento, ese refrigerio es el que sientes al ver a tus hermanos, y compartir un momento espiritual con ellos, pero también un desayuno o una caminata o una charla o simplemente estar juntos.

Me asombra como concluye este salmo, "porque allí envía Jehová bendición y vida eterna"; note que la bendición del Señor sólo viene en esa armonía, en esa unidad, porque podemos estar juntos, pero dar un sonido desafinado, sin embargo cuando hay unidad, la bendición de Dios vendrá sobre nuestras vidas.
¿Porqué dice "y vida eterna"?, ¿será que nos salváremos por estar juntos? No. Es porque el ambiente de unidad y armonía es el indispensable para la salvación de la gente. Cuando Dios escucha la dulce armonía de la unidad, entonces comienza a enviar esos hijos pródigos que necesitan el calor de una familia.

sábado, 30 de agosto de 2014

MI MAYOR AMOR

"Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante en la ley de Moisés? Jesús contestó: —“Amarás al SEÑOR tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. Este es el primer mandamiento y el más importante" 
(Mateo 22:36-38 NTV).

Aunque la razón de esta pregunta fue la insidia, pues existían muchos mandamientos en la ley, y además los fariseos habían añadido un código de conductas morales innumerable, por lo que la respuesta de Jesús causaría polémica y división entre el pueblo, sin embargo Jesús les recuerda el "Shema", que era una plegaria que todos los judíos conocían muy bien, tomada de Deuteronomio capítulo 6 y la repetían dos veces al día.
Sólo imagine la cara de esos fariseos al escuchar la respuesta "Ustedes lo repiten todos los días, desde niños, ¿y no saben que lo más importante es amar al Señor?, lo repiten de labios, pero no está en su corazón", oh eso fue genial¡¡.

Ahora si naveguemos un poquito en la respuesta del Señor. Dios quiere ser nuestro mayor amor, y como amar a Dios tal vez sea un concepto algo difuso, pues cualquiera puede decir que lo ama, hasta los fariseos lo repetían todos los días, Jesús lo explica de una forma sencilla y práctica como es el amor al Señor.

Es amarle con todo el corazón.
Esto habla de nuestras emociones, de enamorarnos de Jesús, cuando te enamoras buscas tiempo con esa persona, le dices que lo amas, te aseguras que todos sepan que tu lo amas, sientes una constante expectativa o emoción cada vez que lo vez, cuando te enamoras todo pasa a un segundo plano, el frío, el tiempo, las distancias, los gastos, todo. Así Dios quiere que le amemos, con esa entrega y pasión, él no quiere ser una regla para ti o una forma sana de vida solamente, el quiere ser tu mayor amor o nada.

Es amarle con toda el alma.
Amar a Dios con el alma es comprometer nuestra voluntad y nuestro deseo, pues amar a Dios también es una decisión, por esta razón es un mandamiento, porque tu decides cumplirlo o no, muchos piensan "Es que no me nace servir al Señor" o "Es que hay cosas que me cuestan" o "Es que yo siento esto..."; porque vivimos en una cultura donde el corazón se manda sólo, se enamora de quién quiere y tu sólo debes "obedecer tu corazón". No es así para Dios, tu decides a quién amar, de hecho hasta tu decides sí tomas la decisión o no, porque la indecisión también fue tu decisión. Amarle con el alma es decir "Yo decido amarle y enamorarme cada día más de Jesús, decido, seguirle y vivir para él y hacer de él el todo de mi vida".

Es amarle con toda la mente.
Esto equivale a llevar a Dios y su palabra a todos nuestros pensamientos, Dios quiere estar en tus emociones, en tu voluntad, pero también en tus pensamientos, pues Dios ve lo que piensas, pero además ve la motivación de cada pensamiento. Podemos decir que amar a Dios con toda la mente es  reemplazar nuestros pensamientos de base, aquellos que han estado en nosotros hasta ahora, por los pensamientos de Dios escritos en su palabra, a la acción de renunciar a los viejos pensamientos por los nuevos de Dios le llamáremos amarle con toda la mente.

Dios quiere ser nuestro mayor amor, no menos que eso.

viernes, 29 de agosto de 2014

NECESITAMOS DENUEDO

"Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios"
(Hechos 4:29-31 RVR1960).

Era el comienzo de la hostilidad y persecución a la iglesia, habían sido arrestado los principales líderes, las amenazas se sentían en aquellos primeros creyentes. Pedro y Juan acababan de ser puestos en libertad con la orden expresa de no hablar, ni enseñar en el nombre de Jesús, y como respuesta a todo esto, nace de forma espontánea el clamor del pueblo de Dios, citados en los versículos del comienzo.

La oración fue "Necesitamos denuedo", y ese denuedo vino como respuesta de la llanura del Espíritu Santo, hoy vamos a reflexionar sobre esto.

Pienso que la conclusión de la iglesia fue esta: "No podemos predicar sin denuedo, no seríamos efectivos, la gente no nos escucharía, no podríamos superar la resistencia, el denuedo es indispensable".
La palabra denuedo es una palabra griega que significa valor, osadía, hablar sin miedo, esta palabra era usada para referirse al derecho que tenían los ciudadanos libres de hablar abiertamente.

Hablar con denuedo es hablar con propiedad. Es decir, esto que les hablo es real, y ha sido real en mi vida. Hoy todos hablamos de Jesús, pero recordemos que para el pueblo Jesús había muerto, sin embargo ellos decían ¡¡Noo, no está muerto, él vive, el resucitó, Jesús esta vivo, y también resucito nuestras vidas¡¡. 

Hablar con denuedo es hablar con pasión. Cuando hablaban sus ojos brillaban, se emocionaban, su corazón ardía al hablar y también ardía el de aquellos que escuchaban, esa pasión no les dejaba quietos, todo el día hablaban de Jesús, todos los días.

Hablar con denuedo es hablar con autoridad. Hablaban con seguridad, no temían a las represalias, no se avergonzaban de su fe, ni de Cristo, tenían el mandato de predicar, la autoridad delegada de Dios y sentían ese respaldo.

Hablar con denuedo es hablar con convicción. Esta convicción provenía de la certeza de tener la verdad, esto es fe, certeza. Pablo dijo "Creí por tanto hable" (2da. Corintios 4/13), la convicción sólo viene cuando hay fe.

Ahora podemos entender un poco más lo necesario que es el denuedo para la conquista de nuestra generación, sin embargo este denuedo sólo viene cuando el Espíritu Santo llena nuestras vidas, y esto ocurre en la oración, en la intimidad con Dios, en el clamor con hambre de almas.

jueves, 28 de agosto de 2014

VAMOS A LA PUERTA ¡¡

"Después de esto, se celebraba una fiesta de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén. Y hay en Jerusalén, junto a la puerta de las ovejas, un estanque que en hebreo se llama Betesda y que tiene cinco pórticos. En éstos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos que esperaban el movimiento del agua"
(Juan 5:1-3 LBLA).

El propósito de Juan al narrar esta historia, fue contar el milagro que ocurrió a un hombre que llevaba treinta y ocho años enfermo y no podía meterse al estanque, sin embargo, añade algunos detalles muy significativos,  y que en sí mismos se vuelven una gran enseñanza para nosotros.

El primero es que todo esto ocurre junto a la puerta de las ovejas. Esta puerta representa a Jesús, el mismo dijo en Juan 10/7 "Yo soy la puerta de las ovejas"; esto simboliza la relación que el Señor quiere tener con nosotros, el quiere que seamos ovejas de su Prado (Salmos 79/13). Una oveja es frágil, esta expuesta a muchos peligros, cuando se enreda en una cerca o rama no puede salir por sí sola, necesita ayuda; cuando es amenazada por un animal depredador necesita ser defendida,  depende de la guía del pastor, para ir a alimentarse, pues no sabe cuales son los pastos buenos o malos, y aún necesita ayuda para volver, pues no sabe reconocer el camino de regreso, por esta razón memoriza la voz de su pastor, y cuando la escucha se siente segura, su obediencia le garantiza protección y seguridad. 
Cuando Jesús vio a Jerusalén, los vio como ovejas que no tienen pastor, que dolor para el pastor de los pastores ver que sus ovejitas no quieren ser pastoreadas, que sienten protección en otras cosas, que alimentan su vida con "chatarra espiritual", que oyen toda clase de voces, que no encuentran el camino de regreso a casa; con toda razón Jesús lloró con tanto dolor.
Habían varias puertas en Jerusalén, pero la puerta de las ovejas era la única que no tenía cerradura, y esto para decirnos que Dios anhela que todos vengan a él con un corazón de oveja, que Dios no hace diferencia, que no le importa mi pasado de "cabra" (indómito), que sí anheló ser pastoreado puedo entrar por su puerta; que la puerta aún esta abierta.

Lo segundo que hace particular esta historia es que tiene lugar junto al estanque de Betesda, ya sabemos que estaba al lado de la puerta de las ovejas, pero este estanqué era muy particular, allí cada cierto tiempo venía un ángel y agitaba las aguas y el primero que se metía en el agua quedaba sano. 
Betesda significa "lugar de misericordia"; piense esto: en ese lugar se juntaban muchos enfermos, afligidos, gente que no tenía oportunidades, seguramente sin familias, personas que vivían de la caridad. Una enfermedad no sólo invalida físicamente, también lo hace socialmente y lo que es peor espiritualmente. Pero Dios había provisto un "lugar de misericordia", donde la gente pudiera ir y tener la esperanza de ser libres de su aflicción y recibir sanidad.
El lugar de la misericordia estaba a los pies de Jesús, (pues él es la puerta) y lo sigue estando, sólo allí podemos alcanzar misericordia, sólo en él podemos encontrar descanso para nuestras almas, sanidad para las heridas de nuestro corazón y de nuestro cuerpo y paz.

¿Cuanta gente hoy esta enferma, espiritual y físicamente, afligida, sin esperanza, sin dirección, sin encontrar el camino de regreso a casa?, hoy Dios tiene que movernos para llevar a toda esa gente al "lugar de la misericordia" y a la puerta de las ovejas.

miércoles, 27 de agosto de 2014

LOS PENSAMIENTOS (3ra. parte)

"¡Cuán preciosos también son para mí, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán inmensa es la suma de ellos! Si los contara, serían más que la arena; al despertar aún estoy contigo" 
(Salmos 139:17-18 LBLA).

Ya hemos podido entender un poquito más acerca de la importancia de los pensamientos, que son y como afectan positiva o negativamente nuestros destinos. Y además como examinarlos para rechazar aquellos que son mentiras disfrazadas de verdad.  Sin embargo esto me ha llevado a hacer dos preguntas: ¿cómo traer los pensamientos de Dios a nuestra mente?, y ¿cómo hacer para cambiar nuestros pensamientos definitivamente?. Reflexionemos sobre esto hoy.

Acerca de la primera pregunta, ¿cómo traer los pensamientos de Dios a nuestra mente?, fueron dos los salmos que me ayudaron a entender la respuesta; los voy a citar y luego los comentamos.
Salmos 139/17 "¡Cuán preciosos son para mi oh Dios tus pensamientos¡"
Salmos 92/5 "Señor, muy profundos son tus pensamientos"
Los pensamientos de Dios son "preciosos y profundos", como las gemas o piedras preciosas, que es necesario mucho tiempo y esfuerzo para encontrarlas, hay que adentrarse en la tierra, rompiendo las rocas, para finalmente hallar ese tesoro. 
Por lo general, los pensamientos de Dios no vendrán de forma espontánea, habrá que profundizar en la palabra de Dios, leerla es un buen primer paso y entenderla y memorizarla, pero luego tendremos que "romper la roca", es decir: meditar en ella, permitirle al Espíritu Santo que nos revele esa palabra, pues ahí impactará nuestro ser, provocando cambios y estableciendo en nuestro corazón nuevos pensamientos, esos nuevos pilares que sostendrán nuestra vida.
Isaías 26/3 dice que Dios guarda en perfecta paz a aquel cuyo pensamiento en el persevera. Perseverar en el pensamiento de Dios, habla de una constante, no de algo que hacemos el día domingo, o una vez al día, sino que siempre, no importa que estemos haciendo, que nuestro pensamiento esté en él, en sus palabras de vida, en su tierno amor, en la gratitud y en la adoración.

La segunda pregunta es ¿cómo hacer para cambiar nuestros pensamientos definitivamente?. Esto no es ambulatorio, requiere una cirugía mayor, pues muchos de esos pensamientos que necesitamos cambiar, están escondidos, fueron incorporados por vivencias, costumbres, heredados, o por nuestras propias ideas o formas, sin embargo Dios puede mudar nuestros pensamientos completamente, quiero compartirles lo que encontré en este texto:
Proverbios 16/3 "Encomienda al Señor tus obras y tus pensamientos serán afirmados". "Encomendar" en el hebreo es "rodar", y era una palabra que usaban cuando un camello dejaba caer su carga, el camello se arrodillaba y dejaba "rodar" su carga. Entonces lo primero que necesitamos es encomendar nuestra vida al Señor, es decir, "rodar"; arrodillarnos, despojarnos, dejar caer nuestra vida delante de él, esto equivale a quebrantar nuestros corazón o pensamientos.
Pero luego me asombré más, porque la palabra "encomendar" en el hebreo era la raíz de la palabra "Golgota", que es el lugar donde murió Jesús. Y esto significa que nuestros pensamientos sólo pueden ser mudados en la cruz, sólo la preciosa sangre de Cristo puede hacer nuevas todas las cosas, necesitamos la revelación de la cruz. 

Que esta sea a partir de hoy nuestra consigna, nuestro mayor anhelo y nuestra determinación: "¡Cuán preciosos también son para mí, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán inmensa es la suma de ellos! Si los contara, serían más que la arena; al despertar aún estoy contigo" (Salmos 139:17-18).

martes, 26 de agosto de 2014

LOS PENSAMIENTOS (2da. parte)

"Oh SEÑOR, has examinado mi corazón y sabes todo acerca de mí. Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto; conoces mis pensamientos aun cuando me encuentro lejos. Me ves cuando viajo y cuando descanso en casa. Sabes todo lo que hago. Sabes lo que voy a decir incluso antes de que lo diga, SEÑOR. Vas delante y detrás de mí. Pones tu mano de bendición sobre mi cabeza. Semejante conocimiento es demasiado maravilloso para mí, ¡es tan elevado que no puedo entenderlo!"
(Salmos 139:1-6 NTV)

Ayer reflexionamos acerca de dos cosas muy importantes acerca de los pensamientos, primero que soy lo que pienso, por tanto cuando Dios nos mira, lo que ve son nuestros pensamientos, David entendió esto, por esta razón decía "Sea grata la meditación de mi corazón delante de ti Señor" (Salmos 19/14). Y también ayer vimos que un pensamiento es un camino, por tanto cada pensamiento me conducirá a un destino particular, de ahí su importancia.

Hoy profundicemos un poco más acerca de los pensamientos.
Nuestra mente no para, produce miles de pensamientos cada día, sin embargo, esta gran cantidad de pensamientos sólo podrá tener tres posibles fuentes de origen, o vienen de nuestra propia mente, o provienen de Dios, o proceden del enemigo de nuestras almas. 
Los pensamientos que gobiernan nuestra mente, gobernarán toda nuestra vida y determinarán el rumbo que tome mi vida, por esta razón nuestra mente se transforma en un verdadero campo de batalla.
Cuando los pensamientos de Dios abundan en nuestra mente, nuestra vida se transforma en el escenario que Dios necesita para desarrollar su propósito en nuestras vidas, pero cuando permitimos que los pensamientos del enemigo tomen lugar en nuestro corazón, estamos deteniendo ese propósito de Dios, estamos afectando negativamente nuestro carácter, y estamos tomando un camino que nos llevará a lugares secos.
De ahí la importancia de revisar nuestros pensamientos constantemente, pues tienen un gran poder sobre nuestras vidas.
He podido notar que una estrategia del enemigo es infiltrar pensamientos en nuestra mente, con pensamientos de mentira, pero los envuelve en un manto de verdad, para que los podamos aceptar, entonces esas mentiras disfrazadas de verdad, o esos caminos comienzan a conducirnos, sin darnos cuenta, lejos de Dios o de su voluntad.
Esos pensamientos son tan sutiles, a veces respaldados con algo de lógica, otras veces con una distorsión de la palabra de Dios. De verdad necesitan ser expuestos a mucha luz para poder identificarlos y la única luz eficaz para esto es la palabra de Dos.
Para poner un ejemplo de esto recordemos a Saúl, él estaba en el frente de batalla, con su ejército preparado, pero el profeta Samuel no llegaba, entonces pensó "y si hago yo el sacrificio; así animaría al pueblo para el combate y Dios se agradaría porque sería una ofrenda para él y tendremos victoria y toda la nación se alegrará"; ¡que pensamiento más noble!, cargado de buenas intenciones, hasta parece ser muy devoto, pues en ese tiempo los sacrificios eran una expresión de adoración a Dios. Sin embargo era un pensamiento de error, su fuente era el enemigo, y el fin de este camino era la exclusión de Saúl del reinado.

Sólo por nombrar algunos de estos pensamientos modernos de mentiras disfrazadas de verdad: "No puedo controlar lo que pienso, sólo vienen a mi mente"; "Pronto me comprometeré con Dios, cuando llegue mi hora"; "Yo amo al Señor, pero también tengo una vida personal". Etc, etc, etc.

Sí nuestro deseo es agradar a Dios, debe haber verdad en todo lo que pensamos, y la única verdad absoluta es la palabra de Dios, Jesús dijo "Santificalos en tu verdad, Tu palabra es verdad"  (Juan 17/17). Que hoy nuestros pensamientos sean expuestos ante esa luz, pues no basta con que sean nobles, o que parezcan agradar a Dios; deben venir de la única fuente confiable de vida y de paz, Jesús.

lunes, 25 de agosto de 2014

LOS PENSAMIENTOS

«Mis pensamientos no se parecen en nada a sus pensamientos —dice el SEÑOR —. Y mis caminos están muy por encima de lo que pudieran imaginarse. Pues así como los cielos están más altos que la tierra, así mis caminos están más altos que sus caminos y mis pensamientos, más altos que sus pensamientos" 
(Isaías 55:8-9 NTV).

Cuando Dios nos mira, no ve nuestra apariencia, o nuestros logros, Dios  ve nuestros pensamientos, no sólo lo que estemos pensando en ese momento determinado, sino todos los pensamientos que componen nuestro ser. David dijo: "Conoce el Señor los pensamientos de los hombres" (Salmos 94/11), y Jesús cuando veía a los religiosos les respondía porque "conocía  lo que ellos pensaban" (Mateo 9/4). Dios ve lo que pensamos.
Nuestros pensamientos nos definen, la Biblia dice "Como son los pensamientos del hombre, tal es el hombre" (Proverbios 23/7). Soy lo que pienso, pero también llegare a ser lo que haya aceptado en mi mente.

En Isaías 55/8 Dios ve una diferencia abismal entre los pensamientos suyos y los de su pueblo, este era el real impedimento para que Dios pudiera manifestarse en sus vidas, y bendecirles, Dios veía en ellos pensamientos de maldad, de indiferencia, de incredulidad, y esos pensamientos daban a luz vidas apartadas de Dios.

Ahora, ¿Porqué Dios habla de "caminos" cuando el tema es los pensamientos?, porque un pensamiento es un camino; existen miles de caminos y todos llegan a lugares diferentes, y cada pensamiento que permitimos en nuestro corazón será como un camino, nos llevara a un destino, veamos:

Cuando Adán y Eva aceptaron este pensamiento "no moriremos, seremos como Dios"; estaban eligiendo un camino, ese camino les llevaba a la separación de Dios, aunque sólo parecía un pensamiento discordante con su creador, aparentemente inofensivo, era un camino de muerte, por eso la Biblia dice que hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero su fin es de muerte. (Proverbios 14/12).
Cuando David aceptó el pensamiento "El Señor me libro de las garras del León y del oso y me librara de este filisteo" (1 Samuel 17/37), también estaba eligiendo un camino, el camino de la victoria, en realidad fue justo allí que David derrotó al gigante, cuando tomó ese camino.
Cuando Josué pensó "Los comeremos como a pan... porque el Señor está con nosotros", elegía su camino, y ese camino llegaba al éxito, a la conquista y a trascender en la historia.

¿Cuales son nuestros pensamientos?, ¿qué caminos hemos elegido?, la Biblia dice "Meditad sobre vuestros caminos", (Hageo 1/7), esto equivale a revisar los pensamientos que hemos permitido en nuestro corazón, y el príncipe de los pastores dijo "Yo soy el camino", cuando en nuestros pensamientos está el Señor y su palabra y en ellos meditamos de día y de noche, entonces habremos elegido el camino de la conquista.

domingo, 24 de agosto de 2014

CADA MAÑANA

"¡El fiel amor del SEÑOR nunca se acaba! Sus misericordias jamás terminan. Grande es su fidelidad; sus misericordias son nuevas cada mañana"
(Lamentaciones 3:22-23 NTV).

Sólo despertaremos alrededor de 29.200 veces, eso si logramos vivir unos 80 años, y tal vez se nos hace tan común que le perdemos el sentido, pero cada mañana es como un milagro, el sol vuelve a nacer, los pájaros vuelven a cantar, es como si todo vuelve a comenzar.

Cada mañana es una evidencia del amor de Dios, pero también una muestra de su misericordia. El profeta Jeremías decía "Sus misericordias son nuevas cada mañana". Son dos las preguntas que vienen a mi corazón acerca de esto; ¿qué son las misericordias del señor? Y ¿como puedes verlas cada mañana?, hoy meditemos en esto.

David decía "Tu misericordia es mejor que la vida", para un judío la palabra misericordia tenía varias connotaciones; bondad, compasión, gracia, pero una que estaba muy presente en este concepto es "amor continuo", la misericordia la entendían como un amor a prueba de todo, y constante en el tiempo, sin variar, por eso es mejor que la vida.
En el español la palabra misericordia viene de "miseria", quisiera unir estas dos ideas para responder la primera pregunta: la misericordia es el amor continuo y eterno de Dios a pesar de nuestras miserias.

Podemos ver la misericordia de Dios cada mañana en todo; al despertar, estar vivos, disfrutar todo lo que Dios ha creado para nosotros, etc, pero principalmente en que cada mañana tenemos una nueva oportunidad, es una oportunidad para buscarlo, es una oportunidad para servirle, es una oportunidad para volver a intentarlo, pero también es una oportunidad para restituir los errores de ayer, cada mañana al despertar, pensemos esto: Dios ha mostrado su misericordia para mi, me ha dado una oportunidad nueva esta mañana, esto nos hará enfrentar nuestro día con una actitud distinta, porque sus misericordias son nuevas cada mañana.

sábado, 23 de agosto de 2014

EL SILENCIO DE DIOS

"Luego Jesús salió de Galilea y se dirigió al norte, a la región de Tiro y Sidón. Una mujer de los gentiles, que vivía allí, se le acercó y le rogó: «¡Ten misericordia de mí, oh Señor, Hijo de David! Pues mi hija está poseída por un demonio que la atormenta terriblemente». Pero Jesús no le contestó ni una palabra. Entonces sus discípulos le pidieron que la despidiera. «Dile que se vaya —dijeron—. Nos está molestando con sus súplicas». Entonces Jesús le dijo a la mujer: —Fui enviado para ayudar solamente a las ovejas perdidas de Dios, el pueblo de Israel. Ella se acercó y lo adoró, y le rogó una vez más: —¡Señor, ayúdame! Jesús le respondió: —No está bien tomar la comida de los hijos y arrojársela a los perros. —Es verdad, Señor —respondió la mujer—, pero hasta a los perros se les permite comer las sobras que caen bajo la mesa de sus amos. —Apreciada mujer —le dijo Jesús—, tu fe es grande. Se te concede lo que pides. Y al instante la hija se sanó". 
(Mateo 15:21-28 NTV).

En una conversación profunda con Belén, mi hija, me contaba acerca de algunas cosas que habían marcado su vida, una de ellas era cuando repitió primero medio, me asombre cuando me dijo que no fue la decepción o el fracaso lo que tocó su corazón, fue que cuando me contó yo guardé silencio, no dije ni una sola palabra y no hice ningún ademán, en ese silencio pudo sentir que la amaba, pero también la confronto y Dios  trató mucho con ella.

Imaginemos la escena, la mujer gritando ¡Hijo de David! Ey ¡Ten misericordia de mi¡, tal vez a muchos no nos cuadré a primera vista la reacción del Señor, el guardo silencio, no dijo nada, pero ella seguía gritando aún más fuerte ¡Hijo de David, ten misericordia de mi!,  fue tanto que colmó la paciencia de los discípulos, y le pidieron a Jesús que la echara.
Ese silencio no era un silencio de "te ignoro" o de "no me importas", era un silencio especial, era el silencio de Dios.
Jesús no sólo quería sanarla, si le conmovía su necesidad y se compadecía oyendo sus súplicas, pero estaba más interesado en su alma, en volver su corazón a Dios y no sólo en que recibiera un bien o un milagro de Dios.

La Biblia dice "Callara de amor" (Sofonias 3/17), el silencio de Dios también es una respuesta, pues nunca es más nítido el amor del padre como en ese silencio, allí Dios esta produciendo la condición necesaria para que él pueda revelarse a nuestras vidas, ese silencio nos quebranta, nos vuelve al lugar correcto, la humillación; sólo allí Dios se glorifica en una vida.

Muchos se decepcionaron creyendo que Dios no les respondió o se afligieron pensando que el Señor no les ama o no se preocupa de ellos, y por eso no les ha les atiende. Hoy entiendo que es todo lo contrario, ese silencio sólo dice cuanto te ama y que no sólo te dará lo que necesitas, sino que quiere preparar tu vida para algo aún mayor.

viernes, 22 de agosto de 2014

¿QUÉ HACES AQUÍ?

"El SEÑOR le dijo: —Sal y ponte de pie delante de mí, en la montaña. Mientras Elías estaba de pie allí, el SEÑOR pasó, y un viento fuerte e impetuoso azotó la montaña. La ráfaga fue tan tremenda que las rocas se aflojaron, pero el SEÑOR no estaba en el viento. Después del viento hubo un terremoto, pero el SEÑOR no estaba en el terremoto. Pasado el terremoto hubo un incendio, pero el SEÑOR no estaba en el incendio. Y después del incendio hubo un suave susurro. Cuando Elías lo oyó, se cubrió la cara con su manto, salió y se paró a la entrada de la cueva. Entonces una voz le dijo: —¿Qué haces aquí, Elías?
Entonces el S EÑOR le dijo: —Regresa por el mismo camino que viniste..."
(1 Reyes 19:11-13 y 15NTV).

Esa noche debía pasar a buscar a la mama a un pueblo llamado Ñipas a 50 kms de Chillan, era una noche oscura y con algo de niebla, nos habíamos propuesto estar allí como a las 4 de la madrugada y eran más de las 5 y no veía el anuncio del pueblo, entonces pregunte en un peaje y me dijeron que me había desviado, que estaba a casi 100 kms del lugar.
Que fácil es desviarse, no lo notas, sigues avanzando y crees que vas bien, cuando te das cuenta estás en otro lugar, no en el que debías estar.

Eso le paso a Elías, un profeta extraordinario, aunque venía de tremendas conquistas, pues había derrotado a los profetas de Baal haciendo descender fuego, había hecho llover, terminando con una larga sequía, y amenazado por Jezabel, la esposa del rey Acab, huye al Sinaí, donde se deprime profundamente y Dios lo confronta; en el versículo 9 Dios le dice ¿qué haces aquí? Y luego le repite la misma pregunta en el versículo 13. Permítame parafrasear esa pregunta: "No estas en el lugar que debías estar, te desviaste".

Ahora bien Dios no discute con el, tampoco lo reprende, sino que primero le hace dormir y comer, pero enseguida le hace dar tres pasos que le vuelven otra vez al propósito de donde se había desviado.

Ponte en pie delante de mi
Sólo cuando estas frente a Dios puedes ver tu corazón, puedes entender tus razones y motivaciones, Elías se argumentaba con "Sentir un vivo celo de Dios", pero él debía ver que había aceptado el temor en su vida, que había tomado decisiones equivocadas, sin consultar a Dios, etc,. El primer paso es estar frente a Dios y ver con claridad nuestro corazón.

Escucha el silbido 
Primero le hace sentir el viento impetuoso, luego el terremoto, y después un incendio, la frase que se repite aquí es "El Señor no estaba allí". Elías debía reconocer la presencia de Dios, este es el segundo paso. Aveces creemos que estuvimos con Dios porque la reunión estuvo increíble o Dios nos uso en un tiempo poderoso. La presencia de Dios está en la quietud, en el silbido apacible.

Regresa por el mismo camino
Cuando te desvías tienes que regresar al camino y recorrer la misma distancia que te desviaste. Esto representa un cambio de rumbo, una disposición a enmendar y volver a hacer lo que hacías antes, las primeras obras.

Nunca deja de asombrarme la ternura de Dios, siempre tendrá un silbido apacible para hacernos volver al propósito, es ese él callado del pastor de los pastores.
Si por alguna razón nos desviamos, ya sabemos como volver al centro del propósito de Dios.

jueves, 21 de agosto de 2014

CRECER EN LA FE

"Los apóstoles le dijeron al Señor: —Muéstranos cómo aumentar nuestra fe. El Señor respondió: —Si tuvieran fe, aunque fuera tan pequeña como una semilla de mostaza, podrían decirle a este árbol: “Desarráigate y échate al mar”, ¡y les obedecería! »Cuando un sirviente vuelve de arar o de cuidar las ovejas, ¿acaso su patrón le dice: “Ven y come conmigo”? No, le dirá: “Prepara mi comida, ponte el delantal y sírveme mientras como. Luego puedes comer tú”. ¿Y le agradece el amo al sirviente por hacer lo que se le dijo que hiciera? Por supuesto que no. De la misma manera, cuando ustedes me obedecen, deben decir: “Somos siervos indignos que simplemente cumplimos con nuestro deber”. 
(Lucas 17:5-10 NTV).

Los bebés nacen con la habilidad de comunicarse sin embargo necesitan desarrollar el lenguaje, y lo hacen desde que nacen, a través de la observación, la imitación y la práctica. Para decirlo de una forma sencilla, nacemos con la semilla del lenguaje, y al crecer da su fruto en palabras, frases y conversaciones.

La fe es el único lenguaje que nos comunica con Dios y comienza a desarrollarse desde el momento de nacer de nuevo, a través de un verdadero arrepentimiento, por esto Jesús dijo "arrepentíos y creed" (Marcos 1/15), no necesitas creer para arrepentirte, necesitas arrepentirte para creer; la fe viene después de nacer.

Los discípulos entendieron la importancia de la fe, por eso le pidieron al Señor que les mostrará como aumentar su fe, la fe no crece espontáneamente; Jesús responde  a esta pregunta tan difícil con dos ilustraciones muy simples, pero en ellas deja ver grandes verdades; hoy meditemos en esa respuesta.

Una semilla pequeña
Como la fe es un lenguaje, al nacer espiritualmente Dios pone esa semilla en nuestro corazón, es una pequeña semilla, es una medida de fe, pero es suficiente para mover la mano del padre. Déjeme explicarlo con el siguiente ejemplo.
Un niño nace con la semilla del lenguaje, (aunque no sabe hablar), pero le comunica a su padre una necesidad, por ejemplo hambre, con gestos, llantos, etc, su padre lo entiende de inmediato y le da lo que pide. Más tarde aprende una palabra: "cheche" y su padre le da la leche.
Jesús les dijo: ustedes ya tienen la semilla de la fe, aunque aún no hayan desarrollado el amplio lenguaje de la fe, "sólo hablenle a lo imposible", y su padre entenderá y se moverá a su favor.

Sirviendo al Señor
La segunda ilustración que usa el Señor para responder la pregunta ¿cómo aumentar nuestra fe? Fue la de un siervo que luego de trabajar todo el día le sirve comida a su Señor y luego come el, ¿qué tiene que ver esto con la fe?, pues que la fe se desarrolla en la acción, cuando el siervo hace su deber, por eso Jesús les hablo de la obediencia; vea, Jesús dijo "Sanad a los enfermos"  (Mateo 10/8), es una orden, también dijo: "Id y haced discípulos" (Mateo 28/19), etc., cuando usted cumple el mandato del Señor su fe crece. Usted no crece en la fe y hace la obra, sino que hace la obra y crece en la fe; primero obedece.

Si anhelamos crecer en la fe recordemos dos cosas, la semilla ya está dentro de nosotros, hablemos sin temor, declaremos lo que Dios hará, y atendamos al mandato del Señor, vamos a los perdidos, enfermos, encadenados, allí está el crecimiento de la fe.

miércoles, 20 de agosto de 2014

EL HERMANO DEL PRÓDIGO

»Mientras tanto, el hijo mayor estaba trabajando en el campo. Cuando regresó, oyó el sonido de música y baile en la casa, y preguntó a uno de los sirvientes qué pasaba. “Tu hermano ha vuelto —le dijo— y tu padre mató el ternero engordado. Celebramos porque llegó a salvo”. »El hermano mayor se enojó y no quiso entrar. Su padre salió y le suplicó que entrara, pero él respondió: “Todos estos años, he trabajado para ti como un burro y nunca me negué a hacer nada de lo que me pediste. Y en todo ese tiempo, no me diste ni un cabrito para festejar con mis amigos. Sin embargo, cuando este hijo tuyo regresa después de haber derrochado tu dinero en prostitutas, ¡matas el ternero engordado para celebrar!”. »Su padre le dijo: “Mira, querido hijo, tú siempre has estado a mi lado y todo lo que tengo es tuyo. Teníamos que celebrar este día feliz. ¡Pues tu hermano estaba muerto y ha vuelto a la vida! ¡Estaba perdido y ahora ha sido encontrado!”». 
(Lucas 15:25-32 NTV).

Todos en algún momento nos identificamos con el hijo pródigo, todos un día volvimos a casa y Dios restauró nuestras vidas, sin duda es una gran historia, con mucha riqueza espiritual, sin embargo el hermano merece una mención especial, de hecho no es un elemento decorativo de la narración del Señor, y nos ofrece la posibilidad de revisar nuestro corazón.
Tal vez con el gozo del encuentro  con su padre, el pródigo paso desapercibido la reacción de su hermano,  pero no  su padre, él no sólo lo nota, sino que habla con el para que deponga su actitud.

La visión de un hermano 
Crecimos juntos con Anita, mi hermana, y recuerdo que medíamos los vasos de bebida y alegaba el que veía que tenía menos; aunque ahora nos de risa, en ese momento era un gran problema.
La visión de un hermano es distinta, porque con la inmadurez de la infancia inevitablemente te comparas en todo análisis. 
Lo primero que podemos observar en el hermano del pródigo es un corazón inmaduro, aunque ya era mayor y trabajaba en la casa de su padre, el se compara con su hermano, como un niño, y se siente en desventaja. El fue incapaz de ver por otro, vio sólo su posición frente a la de su hermano.

El enojo del hermano
El pudo participar igual de la fiesta, y disimular la rabia contra su hermano, sin embargo su enojo pudo más, y esto nos muestra otras cosas.
a) Quería llamar la atención, sería demasiado notoria su ausencia en la fiesta, de alguna forma el estaba diciendo: "Ey, yo también existo", aquí sumamos inseguridad y una autoestima dañada, quería protagonismo en el momento de mayor alegría en la vida se su hermanó.
b) Veía injusticia en el perdón del padre. El sentía que el favor de su padre debía ganarlo con obras y el pródigo no lo había ganado, por el contrario había malgastado y deshonrado a la familia. ¿Cuándo no entiendes el perdón?, cuando tu no has sido perdonado.
c) Quería recompensa, quería animales para festejar, retribución por su lealtad, etc. Aquí muestra su corazón, el no trabajaba por amor al padre, lo hacía por interés.

La decisión del hermano
El hermano del pródigo decide salir fuera de la fiesta, esto es muy decidor, representa salir de la presencia del padre, quedar fuera del propósito, aislarse del cuerpo; todo esto es muy peligroso, te deja en una posición de vulnerabilidad espiritual.

Una vez más me asombra la actitud del padre, él fue afuera a buscarlo, a presentarle argumentos, como poniéndose a su altura, no sabemos que hizo luego el hermano del pródigo, pero vemos un padre inclusivo y lleno de misericordia.

Aunque los argumentos del padre debieron convencer al hermano del pródigo de su mala actitud, creo que hay uno que es infalible, y fue al decirle: "Querido hijo", le estaba diciendo que lo amaba, de verdad que tanto el corazón de un pródigo, como el de un hermano del pródigo se derriten ante el amor del padre.

martes, 19 de agosto de 2014

UN NUEVO LENGUAJE

"No se emborrachen con vino, porque eso les arruinará la vida. En cambio, sean llenos del Espíritu Santo cantando salmos e himnos y canciones espirituales entre ustedes, y haciendo música al Señor en el corazón. Y den gracias por todo a Dios el Padre en el nombre de nuestro Señor Jesucristo". 
(Efesios 5:18-20 NTV).

Cuando comencé a estudiar inglés, todo era tan raro, recuerdo algunas cosas que me llamaron la atención, por ejemplo el primer día evaluaban a cada alumno y lo clasificaban en un nivel, y a partir de ahí ibas pasando niveles, hasta llegar a dominar el idioma, aunque llegué a un nivel medio podía entender las charlas grabadas de inglés y desarrollar varias actividades sin problemas, nos instaban a escuchar música en inglés y ver películas en inglés sin traducción escrita, porque en la medida que ejercitas el idioma lo dominas.

Pablo conocía el mundo espiritual y entendía que es como un idioma, que requiere aprenderlo y ejercitarse para poder dominarlo, porque nuestro crecimiento, desarrollo y ministerio dependerán de esto.

Pablo presenta tres niveles para aprender el idioma espiritual y hoy quiero comentarlos:

Primer nivel: Canten Salmos
Desde niño amé los salmos, pasaba mucho tiempo leyéndolos, memorizandolos y hasta le ponía melodías, y se los cantaba al Señor.
Los Salmos son poesías, canciones, pero por sobré todo son declaraciones de fe, es palabra inspirada por el Espíritu Santo, que ya están escritas, es como el primer nivel del lenguaje espiritual, sólo leer y repetir palabras llenas de fe, inspiradas por Dios. Cuando lo haces, algo sucede, prende tu corazón, trae alegría, motiva a alabar al Señor.
Cuando comenzamos en este primer nivel del lenguaje espiritual, empieza a cambiar nuestra forma de hablar, las quejas y expresiones negativas irán en retirada; y tu boca hablará un nuevo lenguaje, dirá "el Señor es mi pastor, nada me faltara" y se fortalecerá diciendo "El Señor es mi fortaleza y mi escudo, en él espero"

Segundo nivel: Canten himnos
Se que para muchos la palabra "himno", es como pasada de moda, déjeme decirle que yo crecí en una iglesia que cantaba himnos, recuerdo algunos como: "Firmes y adelante" o "Nos veremos a la Aurora" o "Blancos vestidos bañados de luz", sólo por nombrar algunos.
¿Qué son los himnos?, son declaraciones repetitivas, que establecen principios eternos en el corazón, con los himnos no sólo cantabas, sino que aprendías y ejercitabas tu fe, porque en el mundo espiritual las "declaraciones repetitivas" aumentan tu fe, fortalecen tu espíritu y desatan la presencia de Dios. Es un nuevo nivel en el lenguaje espiritual.

Tercer nivel: Cánticos espirituales
Este es un nivel más avanzado, aquí nuestro espíritu tiene comunión directa con Dios, así como los salmos son la inspiración escrita, en los cánticos espirituales el Espíritu Santo inspira directo a tu espíritu para alabar al Señor o para interceder o para soltar algo que este atado o simplemente para edificar tu espíritu y desarrollar tus sentidos espirituales. 
Los cánticos espirituales son oraciones con algo de melodía inspiradas por Dios, directo de tu corazón al corazón de Dios.

Tal vez le suene raro todo esto, pero se le hará sencillo, sólo ejercite estos niveles y desarrolle esté nuevo lenguaje espiritual.

lunes, 18 de agosto de 2014

TRATA DE TOCARLO

"Cuando descendieron del monte, los discípulos se quedaron con Jesús en un amplio lugar llano, rodeados de muchos seguidores y de las multitudes. Había gente de toda Judea y Jerusalén, y de lugares tan al norte como las costas de Tiro y Sidón. Habían llegado para oírlo y para ser sanados de sus enfermedades; y los que eran atormentados por espíritus malignos fueron sanados. Todos trataban de tocarlo, porque de él salía poder sanador, y los sanó a todos". 
(Lucas 6:17-19 NTV)

Debió ser una escena tan impactante como conmovedora, multitudes de todos lados concentradas en Jesús, aunque su motivación haya sido su necesidad física, estaban ahí porque habían escuchado el testimonio del Señor y visto sus milagros y querían que Dios hiciera algo en sus vidas. Me parece oír esos gritos de la gente: ¡Oh Dios mío, estoy sano!; ¡Yo también estoy sano!, cientos de personas gritando de alegría, alabando al Señor, mientras otros intentan colarse entre la multitud para llegar a Jesús.
Aunque la Biblia no lo dice, pero seguramente Jesús oraba por ellos, a otros imponía las manos, o daba la orden sobre los endemoniados y eran liberados, etc, pero era tal la cantidad de gente que de pronto alguien descubrió que de sólo tocarlo recibía sanidad, entonces los gritos cambiaron: ¡Alabado sea el Señor, sólo lo toque y ya estoy sano¡, entonces todos trataban de tocarlo.
No debió ser fácil tocar a Jesús, no sólo debían pasar entre el gentío que lo apretaba, sino que también debían pasar sobre sus temores, sobre sus prejuicios, sobre las miradas de religiosos que observaban incrédulos y llenos de envidia, debían pasar sobre sus creencias religiosas, etc, pero cuando lograban pasar y tocarlo, ocurría el milagro.
Esto fue lo primero que se destaco en mi corazón cuando leí esta palabra, "Cuando la gente es consciente de su necesidad, pasara por enésima de todo por tocar a Jesús". Hoy muchos viven engañados, creyendo que no necesitan a Jesús, que tienen todo, que están bien, pero no es así, su conciencia esta dormida, no pueden darse cuenta que están ciegos, enfermos, atados, pero cuando sean consciente de esto, correrán a Jesús.
Nuestra oración hoy debe ser: "Señor despiertales, hazles consciente de su necesidad de ti, dales la lucidez necesaria para que puedan ver tu amor y correr hacia ti".
Lo siguiente que tocó mi corazón, es que todos, sin importar su procedencia, raza, creencias, pasado, etc, sólo al tocarlo recibían su respuesta, no había más requisito que tocarlo. El amor de Dios es más grande de lo que tu y yo podamos imaginar, en su misericordia cabe todo el mundo, y él esta esperando por todo el mundo corra hacia el.

¡¡¡ Un toque a Jesús y ya nada será igual ¡¡¡, muchos se conformaron con tocar un sistema, otros han tocado sus enseñanzas y profundizan en su teología, otros tocaron su mandato y se alegran en ayudar a otros. Todo esto es bueno, no hay que dejarlo, sin embargo tocar a Jesús es recibir el más grande milagro que un ser humano puede recibir, tocar a Jesús es comenzar a amarlo y vivir para él. 
Hoy mismo trata de tocarlo ¡¡¡

domingo, 17 de agosto de 2014

UN LUGAR DE PAZ

"Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús". 
(Filipenses 4:6-7 RVR1960)

En algunas ocasiones  he entrado en lugares donde de inmediato se percibe un mal ambiente, todo esta tenso y aunque tu no seas parte del conflicto y ni siquiera sepas de que se trata, lo que te provoca es deseos de irte pronto de ese lugar. Aunque las más de las veces que llegas a un lugar hay relativa paz, eso puede generar una grata charla, un momento especial, etc, un lugar de paz te invita a compartir.

La Biblia dice que no debemos estar afanosos, el afán hoy es algo tan normal como la vida, vivimos preocupado de tantas cosas. Entendamos que Dios nos manda no afanarnos (no a no tener problemas), es diferente.
Hay un problema con el afán, en realidad dos. El primero es que afán significa "dividido en partes"; es decir cuando permitimos que nuestro corazón se afané lo que hacemos es que se divida, por un lado confiamos en Dios y creemos en el, pero por otro lado nos preocupamos, esto debilita nuestra fe y aleja la respuesta de nosotros, pero lo más grabe es esto: Dios es un Dios de unidad, el no habita en ninguna división, cuando nos afanamos, Dios percibe un ambiente tenso y le provoca irse.
Lo segundo es que el afán te roba La Paz, tu corazón se acelera, tu mente se distrae, tu carácter se irrita, etc... Jesús es el "príncipe de paz"; ¿puedes imaginar donde le agrada estar?, en un lugar de paz y nuestro corazón debe ser constantemente ese lugar de paz para que desde allí nuestro Señor nos gobierne.

Ante toda aflicción o conflicto de la vida, vamos a Dios, digamosle todo lo que nos pasa, como le dice Pablo a los Filipenses "sean conocidas nuestras peticiones", pero esto no sólo a modo de contarle las cosas, sino que incorpora dos palabras "con ruego y acción de gracias", esto provocará un inmediato descanso y te librara del afán (no de los problemas), entonces ocurrirá algo: "Dios guardara tu corazón en perfecta paz" y ese lugar de paz será la mejor habitación para tu amado Jesús.

sábado, 16 de agosto de 2014

DE ESCLAVO A HIJO

"Sin embargo, cuando se cumplió el tiempo establecido, Dios envió a su Hijo, nacido de una mujer y sujeto a la ley. Dios lo envió para que comprara la libertad de los que éramos esclavos de la ley, a fin de poder adoptarnos como sus propios hijos; y debido a que somos sus hijos, Dios envió al Espíritu de su Hijo a nuestro corazón, el cual nos impulsa a exclamar «Abba, Padre». Ahora ya no eres un esclavo sino un hijo de Dios, y como eres su hijo, Dios te ha hecho su heredero"
(Gálatas 4:4-7 NTV).

Cuando Jesús dijo que había venido a traer libertad (Juan 8), los judíos se ofendieron argumentando que eran libres, sin embargo Jesús hablaba de la esclavitud espiritual a causa del pecado.
Para nuestros tiempos no es muy común este término, así que primero entendamos  La esclavitud como un estado del ser, validado por normas o leyes y por definición indica pertenencia y dominación.
¿Porqué el pecado esclaviza?, porque así como la esclavitud física esta validada por leyes, por ejemplo nuestra legislación no contempla la esclavitud, por tanto en nuestra nación no pueden haber esclavos. Así también la esclavitud espiritual esta validada por una ley espiritual y esta escrita en Juan 8/34 "El que hace pecado, es esclavo del pecado".

La esclavitud trata a las personas como bienes, por tanto tienen un precio, un esclavo sólo puede ser puesto en libertad cuando alguien paga su precio, esta operación en la antigüedad se llamaba "redimir" (comprar un esclavo).
Nuestras vidas son tan valiosas que debíamos permanecer esclavos hasta la muerte, no había precio para nuestra esclavitud, sin embargo Jesús murió en nuestro lugar, su muerte fue el precio de mi libertad. No existe otra forma de ser libre, sino a través del sacrificio de Jesús en la cruz.
¡Jesús nos redimió de la esclavitud del pecado!

Aquí Dios mostró todo su amor para nosotros, pero no llego hasta ahí, luego de liberarnos "nos adoptó como hijos".

Tal vez tengas una definición más profunda, pero La adopción como yo la defino es una declaración legal que establece que un padre toma por hijo a un individuo sin serlo biológicamente, no obstante tendrá los mismos derechos y privilegios que un hijo natural. 
Dios nos adoptó, nos hizo sus hijos, partícipes de su naturaleza, herederos de su gloria, receptores de su tierna paternidad. Esto es realmente glorioso !!!
Galatas 4/6 dice "debido a que somos hijos envió a su Espíritu para que exclamemos Abba Padre", esto es realmente impresionante; pues ser hijos de Dios nos hace poder recibir a su Espíritu, pero no solamente para contemplar sus grandiosas manifestaciones, sino que para poder decir "Abba Padre"; podríamos traducirlo como "papito" habla de cercanía, de confianza, de intimidad entre un hijo y su padre, a través del Espíritu Santo podemos entender, aceptar y recibir la paternidad de Dios y además disfrutar de una relación de hijos, y de amor con nuestro padre.

¿Te sientes hijo, o aún esclavo?, no aceptes ninguna prisión de esclavitud, la sangre de Jesús es suficiente para pagar el precio de tu absoluta libertad, ven a Jesús, rinde tu vida y esas cadenas caerán, entonces que lo hayas hecho recibe el Espíritu de adopción y comienza a disfrutar de una relación íntima con tu padre, no te sientas más extraño, siéntete y vive como un hijo.

viernes, 15 de agosto de 2014

UNA GRAN ENSEÑANZA

"Luego utilizó la siguiente historia para enseñarles más acerca de la oración: «Supongan que uno de ustedes va a la casa de un amigo a medianoche para pedirle que le preste tres panes. Le dices: “Acaba de llegar de visita un amigo mío y no tengo nada para darle de comer”. Supongan que ese amigo grita desde el dormitorio: “No me molestes. La puerta ya está cerrada, y mi familia y yo estamos acostados. No puedo ayudarte”. Les digo que, aunque no lo haga por amistad, si sigues tocando a la puerta el tiempo suficiente, él se levantará y te dará lo que necesitas debido a tu audaz insistencia. »Así que les digo, sigan pidiendo y recibirán lo que piden; sigan buscando y encontrarán; sigan llamando, y la puerta se les abrirá. Pues todo el que pide, recibe; todo el que busca, encuentra; y a todo el que llama, se le abrirá la puerta". 
(Lucas 11:5-10 NTV).

Jesús quiso enseñarles un principio espiritual, "La oración persistente",  y lo hace con una historia tan sencilla que explicarla es innecesario, sin embargo apuntare algunas notas que vale la pena recordar.

"A casa de un amigo"
Cuando oramos y le pedimos algo a Dios, no venimos a casa de un extraño, ni a la aventura, a ver si responde; venimos donde un amigo. Para Dios la amistad era un lazo de amor y lealtad, aún mayor que ser hermanos; Proverbios 18/24 "..Hay amigos más unidos que un hermano", por eso Abraham es llamado amigo de Dios (Isaías 41/8), y Jesús les dice a sus discípulos que ya no los llamara siervos, sino amigos (Juan 15/15).
Cuando pedimos necesitamos ser conscientes de esa cercanía y amistad de Dios, esto aumentará nuestra fe, pues nos hará entender que Dios no le negará algo a sus amigos.

"Llegó una visita"
El hombre no estaba pidiendo para sí, el argumento que presenta es la necesidad de otro, tampoco cualquier necesidad, sino la necesidad de pan, y el pan representa a Jesús y su palabra. De modo que cuando nuestra oración es para que otros reciban a Cristo, para suplir necesidades de otros, Dios estará atentos a respondernos.
La Biblia dice en Santiago 4/3 "piden y no reciben porque piden mal, para gastar en sus deleites". Nuestra oración debe ser una oración de compasión, para cubrir necesidades de aquellos que tienen hambre de Dios.

"Toca lo suficiente"
Jesús dijo que si tocaba la puerta lo suficiente, le abriría y le daría lo que pidió, pero ¿cuanto es lo suficiente? ¿Es una hora o un día o un año?, lo suficiente es el tiempo que Dios considere necesario; muchas veces son minutos, incluso aveces no alcanza a estar la petición en nuestra boca y Dios la responde, pero aveces tarda tiempo, es necesario entender que si nuestra oración se alinea a su voluntad, debemos permanecer insistiendo hasta que responda. El lo hará.

jueves, 14 de agosto de 2014

LA HERENCIA DE LOS HIJOS

"Así que los verdaderos hijos de Abraham son los que ponen su fe en Dios. Es más, las Escrituras previeron este tiempo en el que Dios declararía justos a los gentiles por causa de su fe. Dios anunció esa Buena Noticia a Abraham hace tiempo, cuando le dijo: «Todas las naciones serán bendecidas por medio de ti». Así que todos los que ponen su fe en Cristo participan de la misma bendición que recibió Abraham por causa de su fe" 
(Gálatas 3:7-9 NTV).

En todas las y culturas los hijos heredan los bienes de sus padres, aún en aquellas que no tenían legislación, pues no sólo es un derecho, la herencia es una ley de la vida.
Espiritualmente la herencia también es una ley, es un principio que podemos observar de la siguiente forma.

Dios padre creo todas las cosas, sin embargo a Adán lo formo con sus manos y soplo sobre el aliento de vida, allí le transmitió su herencia; la eternidad, Adán  fue su hijo y esa herencia le pertenecía sin cuestionamiento. Adán tuvo hijos y sus hijos tuvieron hijos hasta usted y yo, y todos nosotros hemos recibido esa herencia, la eternidad.
No obstante Adán pecó, pero no perdió la herencia; perdió su salvación, y heredo a todas sus generaciones una eternidad en perdición.
Jesús nació de la simiente de Adán y la simiente del Espíritu Santo, y compro con su sangre la vida eterna; la salvación. Hebreos 2/14 dice que los hijos participan de sangre y carne, por eso Jesús murió, porque con su sangre nos hizo hijos. En Adán perdimos la salvación y la paternidad, en Cristo fuimos hechos hijos y heredamos la vida eterna con Dios.
Quedemos con esto en mente, lo que es de tu padre lo heredas por ley.

Ahora bien, Abraham creyó en Dios y le fue contado por justicia (Génesis 15/6), cuando Abraham creyó, Dios hizo un pacto con él y le dio la tierra y la multiplicación como herencia, su hijo Isaac lo heredo después de el y Jacob, hijo de Isaac también lo hereda, aún Ismael que no estaba en el propósito recibe la misma herencia, porque era hijo y la herencia es una ley.
A causa de su fe, Abraham fue hecho el padre de la fe y Dios le prometió que todas las naciones de la tierra serían bendecidos por medio de el.
Cuando ponemos nuestra fe en Cristo recibimos la herencia de la vida eterna, pero además nuestra fe nos liga al padre de la fe, Abraham, y nos hace hijos de Abraham, luego la herencia que recibió Abraham se transmite a nosotros por derecho de herencia.

Hace unos días vi en las noticias un señor que vivió en el norte y dejó una gran herencia, pero había pasado el tiempo y nadie la reclamo, por tanto la herencia quedo en arcas fiscales.
Hoy tenemos que reconocer nuestra calidad de hijos de Abraham a través de la fe y reclamar nuestra herencia, Dios no desconocerá esa ley y nos heredara las naciones y la multiplicación. David lo entendió muy bien y dijo "pídeme y te daré tu herencia, las naciones" (Salmos 2/8), pues una herencia que no se reclama es una herencia que no se hace efectiva.

miércoles, 13 de agosto de 2014

ZONA DE DESCANSO

"Luego dijo Jesús: «Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso. Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque yo soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma. Pues mi yugo es fácil de llevar y la carga que les doy es liviana».
(‭Mateo‬ ‭11‬:‭28-30‬ NTV).

La primera vez que viajamos al sur con mi familia, estábamos tan emocionados que nos fuimos a las 3 de la mañana y conduje sin parar hasta Villarrica, alrededor de diez horas, al bajarnos estábamos exhaustos, comimos algo, dimos un breve paseo por el pueblo y dormimos hasta el otro día. De regreso descubrimos en la carretera las "zonas de descanso", lugares habilitados para detenerse y descansar,  de regreso aprovechamos cada lugar de descanso.

La invitación que Jesús nos hace en el texto del comienzo es maravillosa, ¿quién no necesita descanso hoy?. Si usted ha llevado cinco kilos la primera cuadra no es nada, la segunda pesa un poco más, la tercera se hace incómodo, después de un rato termina siendo una carga muy pesada. Las cargas de la vida no sólo son pesadas por lo grabes que sean, sino por el tiempo que llevas cargándola. Pero hoy Dios quiere darnos descanso, y Hay algunos detalles en esta invitación que es bueno mencionar.

Dios les dice "Vengan a mi" a los cansados, ¿porqué no fue Jesús donde los cansados?, porque el principio del descanso es "ir a Jesús", él es la única fuente del descanso. Muchos están tan cansados y creen que buscar a Jesús o servirle es una actividad más y les quitará tiempo para descansar, aunque suena lógico, es mentira; los principios del reino de Dios rompen la lógica, cuando estas cansado y vienes a Jesús, encuentras descanso.

Dios les dice "Pónganse mi yugo", un yugo es una madera que une una yunta de bueyes para hacer una labor en el campo, ¿no estábamos hablando de gente cansada? ¿Cómo descansarán con un yugo?, no olvide que el reino no se mueve por lógica, en realidad les estaba diciendo "sí ustedes se preocupan de hacer mi obra, yo me preocuparé de sus necesidades y de darles descanso". El Señor dijo que su yugo era fácil, ¿porque es fácil?, porque usted se pone una parte del yugo y el Señor la otra parte y quien pone la fuerza es el. Jesús quiere "enyuntarse" contigo.

Dios les dice "Déjenme enseñarles". Muchas veces creemos conocer la fórmula del descanso, intentamos con tiempos de sueño, paseos, terapias, vacaciones y la verdad es que nada de eso funciona del todo, porque el cansancio no sólo es físico, principalmente es espiritual, por eso Jesús hablaba del "descanso del alma".
Suelta tus ideas, rompe tu lógica y deja que Jesús te enseñé a vivir, te aseguro que la única zona de descanso en la carretera de la vida es Jesús.

martes, 12 de agosto de 2014

EL GRAN RESPALDO

"El Señor ha arrojado de delante de ustedes a pueblos grandes y fuertes, y hasta el día de hoy nadie ha podido resistir ante ustedes. Uno solo de ustedes puede hacer huir a mil, porque el Señor su Dios pelea a su favor, como él mismo lo prometió. Tengan, pues, cuidado de ustedes mismos, y amen al Señor su Dios"
(‭Josué‬ ‭23‬:‭9-11‬ DHH).

¡Te invito a pelear a mi casa!, suena divertido, pero era lo que hacia. Los niños tienen la necesidad de pelear o de saber quién es el líder entre ellos, recuerdo en algunas oportunidades haber llevado amiguitos a mi casa sólo para pelear con ellos, pero cerca de mi papá, eso me daba confianza, sabía que el no iba a dejar que me pegarán.

Esa sensación de seguridad y confianza es la que debió sentir Israel, porque el respaldo de Dios en cada conquista era asombroso, Dios literalmente peleaba por ellos. Josué les dice "El Señor ha arrojado a sus enemigos"; la imagen que me provoca esta expresión es la de un padre que ve que están amenazando a su hijo y toma a su enemigo por la espalda con ambas manos y lo lanza muy lejos ¡¡Y no vuelvas a molestar a mi hijo!!, le dice con tono fuerte y desafiante.

Cuando sientes ese respaldo, poco te importara el tamaño de tu enemigo o lo grande de tu desafío, sabes que Dios estará contigo, que el es un poderoso gigante peleando a tu favor, que delante de el los enemigos parecen de juguete.
Se que el enemigo trabaja en esta dirección, en quitar nuestra mirada de Dios, de modo que nos asuste conquistar, en hacernos sentir desprotegidos, desvalidos, y solos, porque cuando pierdo la conciencia del respaldo de Dios, entonces me hago vulnerable, pues mi fe se apaga.

¿Cuál es tu respaldo?, Dios esta contigo, no necesitas nada más, la provisión de tu victoria esta contigo, la garantía de tu éxito esta asegurada.
"Uno de ustedes hará huir a mil"; eso si es respaldo, que uno sólo conquiste a mil, me gusta como lo dice Isaías: "El pequeño vendrá a ser mil, el menor, una nación fuerte. Yo Jehová, a su tiempo lo apresuraré" (Isaías 60/22). Si el enemigo te hizo sentir pequeño hoy grita muy fuerte ¡¡Donde están mis mil, voy por ellos!!, porque tienes lo principal, el gran respaldo.

Al final Josué le da dos consejos que nunca deben pasar inadvertidos:
Primero "ten cuidado de ti mismo". No debía tener cuidado del enemigo, del desafío se encargaba Dios, debía tener cuidado de sí mismos, pues uno puede ser su peor enemigo, la Biblia dice que el corazón es engañoso (Jeremías 17/9), muchas veces uno puede pensar cosas y llegar a creerlas con tanta seguridad, pero son un auto engaño, tu corazón te miente, no confíes en el, sólo escucha la voz de Dios.
David decía "quién conocerá sus propios errores, librarme de los que me son ocultos" (Salmos 19/12),
Y el segundo consejo que les da Josué es "Amén al Señor". Dios puede darles mil victorias, pero el es mejor que todas ellas, su amor permanece, Dios puede hacer grandes milagros, pero nada supera su amor, estar en sus brazos, sentir sus caricias. En el fondo Josué les dice "Que su corazón no esté en la respuesta (tengan por cierto que Dios lo hará), que su corazón esté en amarlo".

El respaldo de Dios esta conmigo, Dios peleara por mi, y hoy me levanto para conquistar mis primeros mil, tendré mucho cuidado de mi, pero por sobré todo amaré a mi Señor con todas mis fuerzas... Que esa sea nuestra consigna hoy.

lunes, 11 de agosto de 2014

SÍGUEME

"Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió" 
(S. Mateo 9:9 RVR1960).

Hoy seguimos modas, costumbres, ideas o pensamientos, etc, parece que nuestra sociedad simplemente sigue lo que sea, nada se cuestiona, sólo se sigue.
Y es que Dios nos creo para "seguir", no para tomar nuestro propio camino, por eso puedes ver a través de la historia que el hombre sólo a seguido a quién se levantó, aveces con ideas terroríficas como Hitler, pero necesitaban seguir.

Es interesante la forma en que Jesús llamó a sus discípulos, diciéndoles "sígueme", siempre existe la tentación a mistificar las historias Bíblicas, al principio yo pensé que estaba la gente haciendo sus cosas y de pronto aparecía Jesús en la escena, tal vez rodeado de un manto de luz, y mirándoles fijamente a los ojos, sin pestañear, con una voz profunda les decía "sígueme"; entonces ellos casi extasiados le decían "si, lo que tu quieras".  Entonces yo pensaba "que difícil llamar a la gente para nosotros" jajaja.
Pero no fue así como ocurrió, muy por el contrario, Jesús conoce muy bien la naturaleza humana, pues él nos creo, y ese "sígueme" tiene algunas consideraciones.

Era un sígueme de amor. 
Jesús no aparece de repente, había dedicado tiempo a estar con ellos, a escucharles, compartió sus actividades, fue a pescar con la gente, fue a sus fiestas, a sus bodas, camino entre ellos como uno más, aún siendo Dios no se sentía superior a ellos, los amaba, les dio dignidad, les hizo sentir personas, importantes, iba a sus casas, comía sus comidas, se río con ellos.
La gente no sigue a quién no ama, Jesús lo sabía. ¿Cuando Adán dejó de seguir a su padre? Cuando dejó de amarlo y escucho otras ideas. 
La gente seguirá a Jesús cuando vea que yo amo a Jesús y que los amo a ellos.

Era un sígueme de visión. 
"Dame un empleado del montón pero con una meta y yo te daré un hombre que haga historia. Dame un hombre excepcional que no tenga metas y yo te daré un empleado del montón" J.C. Penny.
Jesús les mostró una visión, un proyecto extraordinario, su meta era ganar el mundo, y ellos entendieron la visión y sintonizaron con ella, por eso le seguían, aún al punto de despreciar sus propias vidas por seguir a Jesús.
Hoy muchos creemos que seguir a Jesús es segur una religión, o tener una creencia, no hemos transmitido completamente la visión, ni dado a conocer el proyecto del reino, que es superior a toda visión y todo proyecto humano.
Cuando Jesús transmitía la visión ellos se estremecían, como los hombres que iban camino a Emaus, que sólo al oírlo sus corazones ardían (Lucas 24).
Jesús enseño su visión no desde una sala de clases, sino haciéndola, predicando, estando con los necesitados, sanándolos.
La gente seguirá a Jesús cuando vea que hay una visión que es más excelente a lo que ellos seguían anteriormente. Necesito visión.

Era un sígueme de identidad
La necesidad de identidad es inherente al ser humano, necesito identificarme con una familia, con los pares, con pensamientos sociales, políticos de gustos, etc,.
Jesús hizo que la gente se identificará con él, se hizo hombre, hablo su idioma, acerco el reino a las personas. Estoy seguro que los rabinos eran más doctos, profundos y teológicos que Jesús, pero Jesús les hablaba desde su corazón, desde sus vivencias, con parábolas cotidianas, eso acercaba a la gente, porque se identificaban con el.
Cuantas de nuestras lindas costumbres religiosas acercan a la gente o hacen que se identifiquen con el, ¿no es más bien al revés?, aveces hasta sé burlan.
La gente se identificará con Jesús cuando vea nuestras vidas y escuchen nuestras prédicas en nuestras formas de vivir, aún en nuestros errores ellos podrán ver como los enfrentamos, y verán a Jesús y querrán identificarse con él.

Sígueme ¡¡, ya sabemos porque Jesus lo hizo y como Jesus lo hizo, nuestro desafío hoy es a seguirlo, así otros podrán hacerlo.

domingo, 10 de agosto de 2014

NO OLVIDES BOTAR LA BASURA

"Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce los pensamientos que me inquietan. Señálame cualquier cosa en mí que te ofenda y guíame por el camino de la vida eterna"
(Salmos 139:23-24 NTV)

¿Olvidaste alguna vez sacar la basura?, es muy desagradable, y es increíble la cantidad de basura que se acumula en sólo unos días...
También esto puede ocurrir con nuestra casa interna; nuestro corazón, pues aunque no somos del mundo estamos en el y tenemos que convivir con personas que no tienen un corazón para Dios, que hablan negativa e impíamente. Isaías dijo "Hábito en medio de un pueblo de labios inmundos" (Isaías 6/5).
Además estamos expuestos a noticias deprimentes, a presiones académicas y laborales, y a pensamientos  de mentira disfrazados de verdad por el padre de la mentira y que aceptamos inocentemente. Todo esto sin contar los pecados a los que también estamos expuestos.

David entendía que su corazón era la casa de Dios y no estaba dispuesto a dejarlo ensuciar o que fuese un lugar incómodo para Jesús, por tanto se expuso a la mirada de Dios, y le rogó tres cosas.

"Examinarme". Es decir hazme un examen, observa cuidadosamente mi vida, da la idea de la mirada de un doctor, quien profundiza en la observación para poder medicar y sanar su paciente. La verdad es que más experiencias de las que creemos requieren sanidad, de lo contrario se van acomunando en nuestro corazón, y se transforman en estorbos en nuestra vida.

"Conóceme". Hablamos de conocer a alguien cuando tenemos una relación más cercana, esto requiere tiempo, confianza y mucho trato. He visto matrimonios de muchos años que conocen aún lo que piensan. La Biblia utiliza el verbo "conocer" para hablar de la relación íntima de un esposo y su esposa.
David quería ese nivel de conocimiento de Dios hacia él, para que no quedara nada en su vida sin ser expuesto ante la mirada de Dios.

"Pruebame". Es decir: "ponme a prueba, a ver como reacciono, para que veas que hay realmente en mi corazón". Nadie pediría esto a Dios, ¡Señor envíame una prueba¡
Hace algún tiempo un detergente desafio a las consumidoras con la "prueba de la blancura", les decía que no era posible saber su estaba realmente limpio si no se sometía a esa prueba. Las pruebas escudriñan nuestro corazón, aveces sólo luego de una prueba logras ver lo que hay en tu vida.

¿Se habrá ensuciado nuestra casa?, no olvides sacar la basura. Hoy digamosle como David "Señor examinarme, ve las cosas que deben ser sanadas en mi vida. Conóceme, acércate tanto a mi en una relación tan  íntima que pueda estar completamente expuesto ante ti, y Pruebame, observa que hago en la situación que tu quieras, porque sólo quiero andar en tu vedad".

sábado, 9 de agosto de 2014

REVELATE

"Cierto día, David preguntó: «¿Hay alguien de la familia de Saúl que aún siga con vida, alguien a quien pueda mostrarle bondad por amor a Jonatán?». Entonces mandó llamar a Siba, un hombre que había sido uno de los siervos de Saúl. —¿Eres tú Siba? —le preguntó el rey. —Sí, señor, lo soy —contestó Siba. Enseguida el rey le preguntó: —¿Hay alguien de la familia de Saúl que todavía viva? De ser así, quisiera mostrarle la bondad de Dios. Siba le contestó: —Sí, uno de los hijos de Jonatán sigue con vida. Está lisiado de ambos pies. —¿Dónde está? —preguntó el rey. —En Lodebar —le contestó Siba—, en la casa de Maquir, hijo de Amiel. Entonces David mandó a buscarlo y lo sacó de la casa de Maquir"
(2 Samuel 9:1-5 NTV)

Es en situaciones cotidianas y aveces extremas, que se muestra el corazón de la gente, no es posible reprimir por mucho tiempo lo que verdaderamente hay en el corazón, cuando mueves un vaso de leche, lo que caerá será leche,  Jesús dijo "lo que sale del hombre contamina al hombre, porque sale de su corazón" (Mateo 15/18).
Me gusta mucho la historia de David que se narra al comienzo, Mefiboset, hijo de Jonatan, y nieto de Saúl, antecesor en el trono de David, paso de la orfandad y del abandono, al palacio del rey, sin embargo no es eso lo que comentaremos hoy, es de como en esta situación se revela el corazón de David; se muestra públicamente lo que hay dentro de su ser. David dijo: "quisiera mostrarle la bondad de Dios", tal vez no tendría porque haberlo hecho, Mefiboset, era del linaje de una dinastía acabada, pudo representar una amenaza para el rey, pues algún rebelde pudo querer honrar el antiguo trono, a pesar de aquello David muestra la bondad de Dios (compasión), y es que esta es incontenible, no la puedes reprimir, cuando el amor de Dios está en tu vida, la compasión se dejará ver.

¿Cómo nació esa compasión en David?, pues principalmente de su amor por Dios, David amaba a Dios y tenía un diario de vida que llamamos "Salmos", allí le escribía poemas y canciones de amor a su Dios. Cuando amas a Dios no se te hará difícil mostrar bondad.
Pero además esa compasión viene de un genuino amor por Jonatan, su amigo, ellos aunque pudieron ser rivales, desarrollaron una amistad y leal profunda, David dijo que su amor por Jonatan era mayor al de las mujeres (2 Samuel 1/26).
Cuando amas a Dios entonces puedes amar así, incluso a un posible rival. En una oportunidad alguien me dijo: "yo amo sólo a algunas personas, no me pida que ame a la gente", pensé "Espera a que ames a Jesús", hoy esta persona ha abierto su corazón a la gente y esta desarrollando un corazón compasivo. Cuando amas a Dios, amas a la gente y le muestras compasión.
Por ultimo esa compasión viene de un pacto. David y Jonatan tenían un pacto de lealtad y misericordia (1 Samuel 20). El pacto sostiene la misericordia, sólo hay compasión bajo el pacto.
Jesús hizo un pacto de sangre en la cruz del calvario, el nos entrega el perdón de todos nuestros pecados a través de la fe expresada en un genuino arrepentimiento, es ese pacto que desata la misericordia de Dios sobre el hombre. Si estas bajó este pacto harás misericordia.

Tal vez le impresionó el título de hoy, pero note que esta escrito con  "uve", es decir; se refiere a mostrarse no a desobedecer.
Muestra tu corazón como lo hizo David, hoy es un buen día para expresar el amor, haz lazos, demos de gracia lo que también recibimos por esa gracia, haga  misericordia compartiendo de Jesús, invitando a otros, orando por ellos. Hoy llevemos a la mesa del rey a todos los Mefiboset que Dios ponga en nuestro camino.

viernes, 8 de agosto de 2014

EL PILAR DE LA COMPASIÓN

"Así que el Señor le dijo: —La gente de Sodoma y Gomorra tiene tan mala fama, y su pecado es tan grave,
Se acercó un poco más a él, y le preguntó: —¿Vas a destruir a los inocentes junto con los culpables? Tal vez haya cincuenta personas inocentes en la ciudad. A pesar de eso, ¿destruirás la ciudad y no la perdonarás por esos cincuenta?
Entonces el Señor le contestó: —Si encuentro cincuenta inocentes en la ciudad de Sodoma, por ellos perdonaré a todos los que viven allí.
Pero Abraham volvió a suplicar: —Te ruego que no te enojes conmigo por insistir tanto en lo mismo, pero tal vez encuentres solamente treinta... Y el Señor volvió a decirle: —Hasta por esos treinta, perdonaré a la ciudad"
(‭Génesis‬ ‭18‬:‭20, 23-24, 26, 30‬ DHH)

Dios le da a conocer a su amigo Abraham el juicio que había decidido sobre Sodoma y Gomorra, era un juicio de destrucción y de muerte, sin embargo Abraham pudo entender el corazón de Dios, sabía que la misericordia del Señor es grande, que es un Dios compasivo y que atendería su petición.

Abraham fue movido por la compasión a interceder por Sodoma y Gomorra, podemos decir que la intercesión es un pilar de la compasión.
A través de esta experiencia podemos recoger valiosas enseñanzas de esta manifestación de la compasión, la intercesión.

El intercesor es un reflejo.
Interceder es mediar, ponerse entre Dos partes para abogar por una de ellas. Dicho esto podemos entender que Jesús es el más grande intercesor, porque se puso entre el padre y nosotros y a través de su sacrificio logro reconciliarnos.
Cuando Dios vio a Abraham como intercesor, ¿sabe que vio?, vio un reflejo de Jesús, vio la esencia de su hijo en Abraham y Dios se agradó, por eso Dios responde nuestra intercesión y se agrada de ella, porque en tu intercesión ve el reflejo de Jesús, nuestro abogado.

El intercesor presenta argumentos
Me sorprendió como Abraham presenta su causa, como  él aboga por estas ciudades, Abraham presenta argumentos importantes, le dice al Señor: "un Dios justo no castigaría al justo y al impío, si sólo hubiesen 50, 40...10 justos...",  era un argumento de peso, apela a la justicia de Dios.
La Biblia dice que pedimos pero aveces lo hacemos mal (Santiago 4/3), debemos interceder bajo argumentos de peso, primero la sangre de Cristo que conquistó todo para nosotros: salud, salvación, libertad, prosperidad. Interceda con la sangre de Jesús.
El nombre de Jesús es un gran argumento, su nombre está sobre todo nombre (Filipenses 2/9), Jesús dijo "Todo lo que pidas en mi nombre yo lo haré" (Juan 14/13), Interceda a través del Nombre de Jesús.

El intercesor persevera.
La intercesión de Abraham fue osada, pues Dios le respondía y el volvía a presentar su defensa, Abraham pudo aceptar y conformarse diciendo "bueno, no es la voluntad de Dios", pero perseveró, continuó intercediendo una y otra vez; Dios no se vio afectado por esto, no lo vio como un desafío, sino todo lo contrario, vio en Abraham la actitud correcta.
No se canse, continúe intercediendo, pues la respuesta sólo esta reservada para quienes perseveran hasta el fin.

Así cómo en Sodoma y Gomorra, hoy también hay juicio de muerte sobre nuestra generación; de muerte espiritual, ¿quienes tendrán un corazón compasivo y se pondrán entre el pueblo y Dios a interceder?.
Oremos hoy al Señor y pidamosle el corazón de nuestro padre Abraham, lleno de compasión, para interceder sin César, presentando argumentos hasta ver a nuestra nación rendida a los pies de Jesús.

jueves, 7 de agosto de 2014

EJERCITATE MÁS

"Cuando Jesús regresó a Capernaúm, un oficial romano se le acercó y le rogó: —Señor, mi joven siervo está en cama, paralizado y con terribles dolores. —Iré a sanarlo —dijo Jesús. —Señor —dijo el oficial—, no soy digno de que entres en mi casa. Tan solo pronuncia la palabra desde donde estás y mi siervo se sanará. Lo sé porque estoy bajo la autoridad de mis oficiales superiores y tengo autoridad sobre mis soldados. Solo tengo que decir: “Vayan”, y ellos van o “vengan”, y ellos vienen. Y si les digo a mis esclavos: “Hagan esto”, lo hacen. Al oírlo, Jesús quedó asombrado. Se dirigió a los que lo seguían y dijo: «Les digo la verdad, ¡no he visto una fe como esta en todo Israel!"
(Mateo 8:5-10 NTV)

De niño tenía mucha dificultad para ser incluido en un equipo de fútbol, y es que mis demás amiguitos se fijaban en cosas tan superficiales para elegir a los jugadores, como por ejemplo ser bueno para correr o tener habilidad con las piernas y como estos no eran mis talentos, mi única opción era postular al arco, pero cuando lograba convencerlos de ser el arquero, después del tercer o cuarto gol me cambiaban... Un día encontré la solución. Todos mis amigos tenían pelotas plásticas, debíamos  pincharla o rellenarla de papel para que no cayera a casa de los vecinos, entonces junté dinero y compre una pelota de cuero (bueno, parecía de cuero), ¡¡Yo era el dueño de la pelota!!, desde entonces yo elegía el puesto que quería jugar, muchas veces en mitad del juego tome la pelota y me fui a casa, por alguna razón eso me alegraba más que un gol.
Aunque la habilidad para hacer deportes no fue un talento para mi, con el tiempo me esforcé en superarlo, comencé a trotar, largas caminatas, ejercicios, y descubrí que aún sin tener la destreza, si ejercitas puedes desarrollar niveles de habilidad mayores.

Cuando leí la historia del centurión romano note dos cosas, la primera era su nivel de fe, Jesús lo alaba diciendo que en toda la nación no había encontrado tal nivel de fe, pero lo segundo que me impresionó fue lo que provoco ese nivel de fe, verá, el no era judío, y estaba intercediendo por un siervo, aunque el era un hombre de autoridad y pudo simplemente haber pedido un cambio de soldado, el fue donde Jesús y le rogó, se humillo, lo que movió a este centurión  fue la compasión, entonces la compasión desarrolla la fe.
¡La compasión desarrolla tu fe!, la compasión es a nuestra fe lo que el ejercicio es a nuestro cuerpo, mientras más ejercicio hago, más habilidades adquiero, mientras más ejército la compasión, más se desarrolla mi fe.

Definitivamente la fe es el motor, somos salvos por la sola fe, a través de la fe podemos relacionarnos con Dios, la fe nos hace agradar a Dios y la ausencia de ella nos hace desagradarle, y aún más, Dios nos demanda vivir por fe.
Pero la fe no es una virtud o talento humano, todos nacemos con un nivel cero en fe. La fe viene a nuestra vida al oír su palabra, al leerla, memorizarla y estudiarla, la palabra de Dios tiene el poder de traer esa fe a nuestra vida, cuando comencé a leer la palabra de Dios a edad de ocho años, notaba que cada vez que la leía mi corazón se aceleraba, y comenzaba a soñar muchas cosas... era que la palabra de Dios estaba produciendo fe en mi vida.
Bien, luego que escuchas la palabra, tienes la fe suficiente como para creer que Jesús murió por ti y lo recibes en tu corazón, ese es el primer nivel de fe, en adelante tendremos que "desarrollarla" para avanzar de niveles de fe. 
Los discípulos le pidieron a Jesús "aumentanos la fe" (Lucas 17/5), ellos querían subir de nivel.

Cuando creces en la compasión, Dios aumenta tu nivel de fe, cuando oras por alguien y sientes ese dolor como propio, Dios responde tu oración y tu creces en la fe, cuando le predicas a alguien y te esfuerzas por ganarlo para Jesús, y lo ves venir a Cristo sientes un gozo indescriptible, ahí esta creciendo tu fe, cuando intercedes, visitas, vas a buscar, preparas una charla, lo invitas a la reunión, oras por un enfermo, etc. Ellos se benefician, pero déjame decirte que el más beneficiado eres tu, porque justo en ese instante estas creciendo en tu fe.

¿Quieres más fe?, ejercitaste más... Compasión.

miércoles, 6 de agosto de 2014

MIRA EL INDICADOR

"Ahora, si solo perdonaras su pecado; pero si no, ¡borra mi nombre del registro que has escrito! Pero el SEÑOR respondió a Moisés: —No, yo borraré el nombre de todo aquel que haya pecado contra mí. Ahora ve y lleva al pueblo al lugar del que te hablé. Mi ángel irá delante de ti. Cuando llegue el día de pedirles cuentas a los israelitas, ciertamente los haré responsables de sus pecados"
(‭Éxodo‬ ‭32‬:‭32-34‬ NTV)

Era una noche bien fría, venía de regreso a casa con mi familia y algunos discípulos,  cuando de pronto noté que el auto no tenía fuerzas, entonces aceleraba más, pero no avanzaba, pensé ¡que pasa¡ y de pronto veo el tablero y no tenía gasolina, había olvidado cargar el estanque, el auto sólo anduvo un par de cuadras más y quedo parado, Fue una situación muy incomoda que sólo se alivió en parte al ver a toda la gente que venía conmigo empujando el auto hasta la siguiente estación de servicio.
Imagínate lo que pasaría si los automóviles vinieran sin indicador de bencina, habría muchos autos parados a la orilla de las avenidas en la misma situación.

Si tuviéramos que evaluar nuestro propio nivel de compasión tal vez seamos benevolentes, sin embargo Dios ha puesto un indicador de compasión en cada uno de nosotros, se llama compromiso, así como miras el indicador de bencina y ves cuanta bencina tiene tu estanque, así puedes ver cuánta compasión hay en ti sólo viendo tu nivel de compromiso.

Los versículos del comienzo siempre me impactaron, Moisés estaba dispuesto a ser excluido del libro de la vida para salvar a su pueblo, estaba poniendo su propia vida por la de la gente, verdaderamente Moisés tenía su indicador de compasión a full, pues su compromiso era impresionante.

¿Cómo puedo ver el nivel de compromiso?, veamos algunas de las maneras:
En la intensidad de tu oración, cuando oras por la necesidad de otro como sí fuera tu propia necesidad, te comprometes con esa causa y clamas a Dios.
Cuando te haces parte del conflicto, ya no dices "perdónalo", sino que "perdónanos"; sientes la carga como propia.
Cuando quieres ser parte de la solución y le dices a Dios "Señor ¿que hago?, dame la estrategia para intervenir".
Cuando no miras el costo que pueda significar esa respuesta, en cuanto al tiempo que necesites orar o ayunar, o incluso a la inversión que necesites hacer.
Cuando no te duele postergarte en bien de otro, y le regalas tus horas, tus días, para ver en ellos la respuesta.
Cuando crees a pesar de las circunstancias.

Hoy es un buen día para ver el indicador de compasión, tal vez sea necesario ir a la estación de servicios.

martes, 5 de agosto de 2014

UN HERMOSO FRUTO

"Jesús tuvo compasión de ellos, y les tocó los ojos. En el mismo momento los ciegos recobraron la vista, y siguieron a Jesús".
(San Mateo 20:34 DHH).

Era una tarea para la casa, había que envolver unos porotitos en algodón y mojarlos y ponerlos en un vaso, cada día había que apuntar las observaciones y cuidar que no se secara. Fue tan impresionante para nuestra mente de niños ver que germinaran, era algo así como que algo tuyo diera fruto, casi que te sentías padre de un poroto.
Cuando el creador dio la orden al comienzo de la vida y dijo "fructificad y multiplicaos...", fue tan poderosa esa orden que todo da fruto, aún  los pensamientos dan un fruto, y las emociones también.

El texto de hoy habla de la sanidad de Jesús a unos ciegos, sin embargo encontré en el este principio de "dar fruto", pues esta sanidad fue fruto de la compasión.
Hoy quiero meditar acerca de dos frutos de la compasión.

La compasión da a luz la visión.
¿Puedes imaginar lo que significo para estos ciegos él comenzar a ver?, debió ser maravilloso, gritaban de alegría, corrían para poder ver más cosas, debieron pasar horas contemplando sus manos o un árbol o una puesta de sol. La visión para ellos significo volver a vivir, una vida completamente distinta e infinitamente superior a la de antes.
Cuando tienes compasión por los perdidos y oras a Dios por ellos, sacas tiempo y recursos para afectar sus vidas, esto dará un hermoso fruto, ellos tendrán visión, serán abiertos sus ojos, Jesús dijo "Porque viendo no ven" (Mateo 13/13), ellos están ciegos, por eso hacen lo que hacen, por eso destruyen sus vidas sin darse cuenta, pero cuando conocen a Jesús su ceguera espiritual es quitada y su alegría será semejante a la de estos ciegos. La visión es un fruto de la compasión. No permitas que sigan ciegos, ten compasión.

La compasión da a luz propósito.
Luego de recuperar la visión decidieron "seguirle", no tenían que hacerlo, por fin podían hacer todo lo que quisieran o lo que soñaban, sin depender de la caridad de la gente, pero cuando fueron abiertos sus ojos pudieron ver que el mejor camino que podían seguir era Jesús, no sólo habían encontrado la vista, también habían hallado propósito, el verdadero sentido de sus vidas.
Cuando tienes compasión por los perdidos, esta dará a luz otro hermoso fruto, ellos encontrarán propósito, créame que no existe alegría mayor en esta vida que ver a un "ex ciego" disfrutar seguir a Jesús, encontrando en él el propósito de su vida.

La compasión no tiene más interés que el bendecir a otro, cubrir su necesidad, sin embargo tiene estos hermosos frutos, la visión y el propósito.
Que hoy Dios pueda abrir nuestros ojos espirituales ante esta realidad: están ciegos, no saben que caminan hacia la perdición, pero la compasión dará su fruto en ellos.

lunes, 4 de agosto de 2014

DESPERTANDO LA COMPASIÓN

"¡No! Oh pueblo, el SEÑOR te ha dicho lo que es bueno, y lo que él exige de ti: que hagas lo que es correcto, que ames la compasión y que camines humildemente con tu Dios"
(Miqueas 6:8 NTV).

En nuestros días hemos perdido la capacidad de asombro, se nos hace natural ver en televisión una tragedia, accidentes en vivo, o el dolor de la guerra en la franja de Gaza, esto nos hace ser indiferentes hacia el sufrimiento, se han adormecido nuestros sentidos.

La compasión es más que la empatía o el dolor por la necesidad de otro, es la determinación a intervenir en ese dolor, es un dolor que provoca acción.

La compasión es una manifestación del amor, y Dios es amor, la Biblia dice que quien no tiene amor, no tiene a Cristo (1 Juan 4/8), luego quién tiene ese amor inevitablemente se manifestará en compasión hacia los perdidos.

Dios es un Dios de compasión, cuando él vio el dolor humano se involucró con el y dejo su lugar de honor, y tomó un lugar de humildad, entendiendo que la única forma de afectar la necesidad de otro es abandonar nuestro lugar, pues la compasión demanda sacrificio y esfuerzo, pero este es un costo que quien ama no considera.

Me impresiono el versículo que cite al comienzo, literalmente dice que "Dios exige de mi compasión", esto significa que la compasión no es una opción, tal vez muchos puedan creer que la compasión no forma parte de su ministerio, pues debe saber que la compasión no forma parte de ningún ministerio, la compasión forma parte de un verdadero cristiano.

¿Estará dormida la compasión?, de pronto sea necesario despertarla, pues cuando se adormecen los sentidos espirituales deben ser remecidos con urgencia.
Primero en un acto de humildad reconocer ese sueño delante de Dios en arrepentimiento. 
Luego elevar un clamor "Dios, dame tu corazón compasivo, llename de tu amor".
Después abrir los ojos y ver la necesidad que hay a tu alrededor e involucrarte en intercesión y dejar tu lugar e ir al perdido y rescatarlo.

Este será el nombre de mi semana, "despertando a la compasión".

domingo, 3 de agosto de 2014

EN EL TIEMPO DE DIOS

"Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo"
(‭1 Pedro‬ ‭5‬:‭6‬ RVR1960)

¿Cuál es el tiempo de Dios?, porque Moisés debió esperar 40 años y Abraham 25 años para que Dios les respondiera, ¿qué patrones rigen ese tiempo?, más allá de la soberana voluntad de Dios, pues el hace como el quiere y cuando él quiere, pienso que ese tiempo de espera tiene una razón fundamental; formar nuestro carácter.

Entendemos la exaltación como el tiempo en que él responde y realiza su propósito en nosotros, sin embargo Pedro habla de un proceso previo a la exaltación; la humillación.
¿Qué es la humillación?, nos conviene entenderlo, pues sólo al final de este proceso Dios te exalta, hablemos hoy acerca de esto:

La humillación es la muerte de nuestro "yo"
La verdad es que Dios nos ama tal como somos, pero no puede manifestarse en nuestras vidas hasta que nuestro yo muere, ¿qué es la muerte de nuestro yo?, veamos algunas de las respuestas.

1.- Es olvidarte de ti mismo. Jesús dijo: "...Si alguno quiere ser discípulo mío, olvídese de sí mismo, cargue con su cruz cada día y sígame". (‭San Lucas‬ ‭9‬:‭23‬ DHH), otra versión dice "abandone su forma egoísta de vivir"; morir es olvidarte de ti, de tus necesidades y sueños; quitarte del centro del universo por seguir a Cristo, y abrazar las necesidades de Dios y el sueño de Dios para ti; que por cierto es mucho mayor al que tu puedas tener.

2.- Es morir a nuestra vieja naturaleza de pecado. La Biblia dice en Romanos 6/10 "Así también vosotros consideraos muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro". Es interesante el consejo de la palabra de Dios, "considerarse muerto", un muerto no se aíra, no siente celo, temor, no tiene pensamientos incorrectos, etc. Simplemente esta muerto.
Spurgeon, el príncipe de los predicadores, solía decir "todos nosotros tenemos a nuestro peor enemigo dentro de nosotros", y es la vieja naturaleza o la naturaleza de pecado, esta querrá siempre inclinarte hacia el mal, cuando tu se lo permitas, por esta razón Pablo le dice a Timoteo "ten cuidado de ti mismo" (1 Timoteo 4/16).
A nuestra vieja naturaleza no debemos reprimirla, debemos matarla, y ¿cómo podemos matarla?, pues en la cruz de Cristo. En Galatas 5/24 dice "Los que son de Cristo han crucificado a la carne con sus deseos y pasiones". La vieja naturaleza sólo muere en la cruz.

3.- Es morir al orgullo. El orgullo es la sublimación del "yo", es considerarse más que otros, enaltecerse. El orgullo se manifiesta de muchas maneras en nuestras vidas, por ejemplo en el desprecio hacia las habilidades de otro, en la resistencia a cualquier autoridad, padres, profesores, jefes, etc, en la rebeldía hacia las normas y reglas, en el deseo de independencia, en la dificultad para obedecer. En la incapacidad para escuchar, en la obstinación de nuestras ideas, en la dificultad para reconocer nuestras faltas, o pedir ayuda, en el temor a equivocarte, etc., pero principalmente en no considerar a Dios en nuestras vidas.
Todos tenemos una cuota de orgullo de fábrica, El orgullo nos aleja de Dios, (Salmos 138/6), y debe ser quebrantado toda vez que queramos que Dios se glorifique en nuestras vidas.

La invitación hoy es a humillarnos bajo la poderosa mano de Dios, abandonando nuestro egoísmo, rindiendo nuestra vieja naturaleza y nuestro orgullo a los pies de la cruz. Dios jamás se saltará el tiempo de la humillación, él es paciente, si tiene que esperar un año u cuarenta lo hará, porque su principal deseo es darnos la forma que sostenga la exaltación, recién ahí llega el tiempo de Dios.

sábado, 2 de agosto de 2014

SIGUE HASTA ALCANZARLO

"Pasando Jesús de allí, le siguieron dos ciegos, dando voces y diciendo: ¡Ten misericordia de nosotros, Hijo de David! Y llegado a la casa, vinieron a él los ciegos; y Jesús les dijo: ¿Creéis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: Sí, Señor. Entonces les tocó los ojos, diciendo: Conforme a vuestra fe os sea hecho. Y los ojos de ellos fueron abiertos. Y Jesús les encargó rigurosamente, diciendo: Mirad que nadie lo sepa"
(‭S. Mateo‬ ‭9‬:‭27-30‬ RVR1960).

Debió ser una escena normal, enfermos gritando detrás de Jesús para que los sanase, tal vez era tanto el alboroto y el griterío por necesidades de sanidad y demás, que la voz de estos ciegos se perdía en la multitud.
Hay algunos detalles de esta historia que son grandes lecciones para nosotros hoy:

Los ciegos elevaron un clamor. No eran simples gritos, esto les hizo diferente con las demás plegarias, ellos clamaron. El clamor es un grito del alma, que se deja oír fuertemente por quienes estén a tu lado, pues el clamor no tiene vergüenzas, porque está tan comprometido con obtener la respuesta que no le importa las opiniones, ni las críticas.
Ellos clamaron misericordia, entendían que no merecían un milagro, es decir tuvieron una actitud de humildad, reconociendo su situación delante de Dios, pero además le reconocieron a él, pues dijeron "Hijo de David"; con esto lo reconocían públicamente como el Mesías.

En esta sanidad Jesús no se detuvo para sanarlos, como en la mayoría de sus milagros, sino que ellos debieron seguirlo, la Biblia no relata cuánto tiempo o distancia fue necesario que le siguieran, entendemos lo difícil que pudo ser para dos ciegos seguirle en medio de la multitud, pero ellos no estaban dispuestos a perder su oportunidad, iban a hacer todo lo posible por alcanzar su milagro.

Quiero detenerme brevemente en esto, tal vez muchos hoy necesitamos respuestas de Dios así de poderosas, sin embargo es necesario seguir hasta alcanzarlo, como estos ciegos, no fue fácil para ellos, pero permanecieron, insistieron, no se rindieron hasta ver su milagro.
Nuestra cultura nos ha hecho ser "inmediatistas", al no ver resultados en el tiempo que deseamos nos desanimamos. Jesús les preguntó ¿creen que puedo hacerlo? Y ellos dijeron ¡¡ Si Señor¡¡, sólo la fe genuina te hace perseverar, te hace seguir creyendo hasta alcanzar tu milagro. Esa fe te hace derribar obstáculos, te lleva a clamar más y más fuerte, te hace ignorar el que dirán, porque sabes que Dios tiene una respuesta para ti.

La invitación de Dios para mi y para ti hoy es sigue corriendo, cree, no te canses, porque si perseveras alcanzaras tu milagro.

viernes, 1 de agosto de 2014

CONECTADOS

"El SEÑOR le dijo a Moisés: «Da las siguientes instrucciones a Aarón: cuando pongas las siete lámparas en el candelabro, hazlo de manera que la luz alumbre hacia adelante, enfrente del candelabro». Y así lo hizo Aarón; instaló las siete lámparas para que reflejaran su luz hacia adelante, tal como el SEÑOR había ordenado a Moisés"
(Números 8:1-3 NTV)

En la era de la conectividad pareciera imposible sobrevivir sin un celular de última generación o sin redes sociales, el fenómeno de internet nos ha obligado a relacionarnos de formas diferentes, a crear nuevos patrones de comunicación, estar conectados al ciber espacio es realmente existir en nuestros días.

Dios le dio a Moisés el detalle de toda la construcción del templo, es interesante que cada instrucción estaba  marcada por un principio espiritual.
El candelabro tenía un significado especial, representaba a su pueblo, a su iglesia, a cada uno de nosotros, su función era ser luz, tenía siete lámparas conectadas a un mismo candelabro y esto habla de la perfecta unidad, era hueco, cada día se debía rellenar de aceite, que era el combustible para que pudiera dar luz, esto representa la presencia del Espíritu Santo.
Observemos algunos detalles.

La primera conexión 
El candelabro debía estar dentro del tabernáculo, cerca de la entrada, al lado izquierdo, en el patio llamado "el atrio" o lugar santo, allí los sacerdotes ofrecían sacrificios y el pueblo adoraba a Dios. El primer principio aquí es "conectados a la adoración", el candelabro nos representa a nosotros, y Dios quiere que nuestra vida sea una vida de adoración, que estemos conectados a su presencia. Dios continúa buscando adoradores, hombres y mujeres que movidos por su amor por Dios vivan vidas que adoren al Señor.

La segunda conexión 
El candelabro sólo podía brillar en el atrio o lugar santo. no es posible ver a Dios, ni relacionarnos con el sin santidad, (Hebreos 12/14), no es posible adorarlo sin santidad (Salmos 96/9). Para estar conectados a un Dios de santidad necesitamos santidad, y esto no es ser perfectos, sino apartarnos de lo malo, la santidad es la obra del Espíritu Santo en nuestras vidas y se incrementa en la medida que buscamos y profundizamos en Dios.

La tercera conexión 
El candelabro tenía siete lámparas que son las que nos representan, pero todas estas  lámparas estaban conectadas al mismo candelabro, y este representa a Jesús. Debemos estar conectados con Jesús, el es la fuente de la luz, no podremos brillar sin el, Jesús dijo "fuera de mi nada podéis hacer" (Juan 15/5), desconectados de Jesús nuestras vidas se arruinan.
¿Cómo te conectas a Jesús? A través del arrepentimiento, esta es la puerta, no importa cual sea tu pecado, si estas arrepentido Dios te perdona y te conecta a su cuerpo. Te conectas con Jesús a través de la oración, cada vez que lo buscas y oras tu espíritu tiene coneccion directa con Dios. Te conectas con Jesús a través de su palabra, esta será tu alimento, tu guía en tu caminar. Te conectas con Jesús a través de la Iglesia, este es el cuerpo de Cristo, si te desconectas de el te secas y te mueres.

Tal vez sea bueno desconectarnos un poco del ciber mundo y conectarnos con Dios, conectarnos a la adoración, conectarnos a la santidad, con su presencia, que interesante que Dios pensó primero en un mundo conectado, pero con él.