martes, 23 de diciembre de 2014

¿QUE HORA ES?

"Entonces Pedro, poniéndose en pie con los once, alzó la voz y les habló diciendo: Varones judíos, y todos los que habitáis en Jerusalén, esto os sea notorio, y oíd mis palabras. Porque éstos no están ebrios, como vosotros suponéis, puesto que es la hora tercera del día. Mas esto es lo dicho por el profeta Joel"
(Hechos 2:14-16 RVR1960

En tiempos bíblicos no tenían reloj, pero marcaban las horas por la luz del día; Pedro sitúa el evento más importante de la iglesia, la venida del Espíritu Santo, a la hora tercera, y esto no solo para añadir un dato, sino para dar cuenta de lo relevante de este acontecimiento. La hora tercera eran las 9 de la mañana, y tenía un importante significado para los judíos, y lo tiene también para nosotros hoy.

La hora tercera era la hora del sacrificio
Los judíos realizaban muchos tipos de sacrificios y holocaustos, cada uno de ellos de una forma y significado especial, uno de estos sacrificios, tal vez el más común, era el "Sacrificio Continuo", la Biblia dice: "Esto es lo que ofrecerás sobre el altar: dos corderos de un año cada día, continuamente. Ofrecerás uno de los corderos por la mañana, y el otro cordero ofrecerás a la caída de la tarde" (Éxodo 29:38-39), este sacrificio debían hacerlo cada día, todos los días del año, por esto era llamado continuo, porque se hacia sin interrupción, y según la tradición judía, el sacrificio de la mañana se hacia a las 9 de la mañana o a la hora tercera.
El sacrificio continuo tenía una clara alusión al sacrificio de Cristo en la cruz, debían realizarlo cada mañana y cada tarde, dando a entender el poder de la cruz para limpiar el corazón de todo pecado, y también como la sangre derramada por el cordero de Dios, limpia una sola vez y para siempre, limpia continuamente nuestras vidas. La Biblia dice: "Era la hora tercera cuando le crucificaron" (S. Marcos 15:25), Jesus fue crucificado justo a la hora del sacrificio de la mañana, de modo que cuando Pedro le dice a la gente que observa el derramamiento del Espíritu Santo, y que pensaban que estaban ebrios, Pedro les responde diciendo:"Estos no están ebrios, pues es la hora tercera", no les esta diciendo "es muy temprano para beber", les esta diciendo: "Gracias al sacrificio de Jesus en la cruz, tal como el padre demanda en la ley, ha podido venir sobre nosotros y en nosotros el Espíritu Santo"

La hora tercera es nuestro argumento.
Lo que hace posible la venida del Espíritu Santo, es el sacrificio de Jesus en la cruz, por eso el Señor les dijo a sus discípulos cuando estaba con ellos: "Les conviene que me vaya", es decir los más beneficiados con la muerte y resurrección del Señor seriamos nosotros, pues el sacrificio de Cristo en la cruz es el único argumento que hace posible su venida.
En otras palabras, Pedro no estaba dando cuenta de la hora de la visitación del Espíritu de Dios, estaba presentando un argumento espiritual, antes de la cruz el Espíritu Santo no podía venir a vivir al corazón de toda la gente, solo determinadas personas como reyes, sacerdotes o profetas podían tener esta gran bendición, pero Dios quería llenar de su Espíritu a toda la nación, sin embargo el gran obstáculo era el pecado, el Espíritu de Dios no puede habitar en la maldad y el pecado, pero cuando Jesus derramó su sangre en la cruz, esa sangre limpia todo pecado del corazón, permitiendo que el Espíritu Santo pose en tu vida y se quede para siempre allí, por eso Pablo dice: "porque para vosotros es la promesa", solo para quienes han sido lavados y limpiados con la sangre del cordero. El argumento que anunciaba Pedro fue: "Es la hora tercera, pero esta vez no es cualquier sacrificio, sino que es el sacrificio perfecto, el sacrificio del Mesías, por tanto ha venido el Espíritu de Dios sobre nuestras vidas". Y el argumento para nosotros es: "Por cuanto he sido lavado con la sangre de Cristo, Dios puede llenarme de su Espíritu"

La hora tercera es hoy; no fue, aun es.
Alguien pudiera decir que lo que ocurrió con estos discípulos es un evento reservado solo para ellos, pero no es así, vea esto: el mandato de realizar un sacrificio continuo para los judíos, tenía una razón especial, por una parte era establecer la necesidad constante de limpieza y santidad, pero por otra parte establecer que el Sacrificio del cordero de Dios era suficiente para limpiar todo pecado, de todos los hombre y para siempre, es tanto el poder de esta sangre que limpia continuamente, en este mismo instante esta limpiando nuestras vidas; el sacrificio de Jesus fue a la hora tercera, pero la sangre del hijo de Dios es tan poderosa, que no es necesario otro sacrificio. Fue el ultimo y único sacrificio, tan grande y poderoso que Dios detuvo el reloj espiritual en ese minuto, justo a las 9 de la mañana, hoy aun es la hora tercera, la hora del sacrificio, quien venga a Jesus encontrará perdón, sanidad y liberación de toda culpa, pero además es la hora tercera para nosotros, porque aun hoy su glorioso Espíritu puede venir sobre nuestras vidas.

Hoy vivimos preocupados de la hora, corremos para alcanzar una hora, pero solo hay una hora que debe preocuparnos, la hora tercera, la hora de vivir en la cruz y la hora de buscar la llanura de su Espíritu Santo, no estas atrasado, aun es la hora tercera.

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