miércoles, 6 de agosto de 2014

MIRA EL INDICADOR

"Ahora, si solo perdonaras su pecado; pero si no, ¡borra mi nombre del registro que has escrito! Pero el SEÑOR respondió a Moisés: —No, yo borraré el nombre de todo aquel que haya pecado contra mí. Ahora ve y lleva al pueblo al lugar del que te hablé. Mi ángel irá delante de ti. Cuando llegue el día de pedirles cuentas a los israelitas, ciertamente los haré responsables de sus pecados"
(‭Éxodo‬ ‭32‬:‭32-34‬ NTV)

Era una noche bien fría, venía de regreso a casa con mi familia y algunos discípulos,  cuando de pronto noté que el auto no tenía fuerzas, entonces aceleraba más, pero no avanzaba, pensé ¡que pasa¡ y de pronto veo el tablero y no tenía gasolina, había olvidado cargar el estanque, el auto sólo anduvo un par de cuadras más y quedo parado, Fue una situación muy incomoda que sólo se alivió en parte al ver a toda la gente que venía conmigo empujando el auto hasta la siguiente estación de servicio.
Imagínate lo que pasaría si los automóviles vinieran sin indicador de bencina, habría muchos autos parados a la orilla de las avenidas en la misma situación.

Si tuviéramos que evaluar nuestro propio nivel de compasión tal vez seamos benevolentes, sin embargo Dios ha puesto un indicador de compasión en cada uno de nosotros, se llama compromiso, así como miras el indicador de bencina y ves cuanta bencina tiene tu estanque, así puedes ver cuánta compasión hay en ti sólo viendo tu nivel de compromiso.

Los versículos del comienzo siempre me impactaron, Moisés estaba dispuesto a ser excluido del libro de la vida para salvar a su pueblo, estaba poniendo su propia vida por la de la gente, verdaderamente Moisés tenía su indicador de compasión a full, pues su compromiso era impresionante.

¿Cómo puedo ver el nivel de compromiso?, veamos algunas de las maneras:
En la intensidad de tu oración, cuando oras por la necesidad de otro como sí fuera tu propia necesidad, te comprometes con esa causa y clamas a Dios.
Cuando te haces parte del conflicto, ya no dices "perdónalo", sino que "perdónanos"; sientes la carga como propia.
Cuando quieres ser parte de la solución y le dices a Dios "Señor ¿que hago?, dame la estrategia para intervenir".
Cuando no miras el costo que pueda significar esa respuesta, en cuanto al tiempo que necesites orar o ayunar, o incluso a la inversión que necesites hacer.
Cuando no te duele postergarte en bien de otro, y le regalas tus horas, tus días, para ver en ellos la respuesta.
Cuando crees a pesar de las circunstancias.

Hoy es un buen día para ver el indicador de compasión, tal vez sea necesario ir a la estación de servicios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario