domingo, 21 de septiembre de 2014

FLORECIÓ ¡¡¡

"Y aconteció que el día siguiente vino Moisés al tabernáculo del testimonio; y he aquí que la vara de Aarón de la casa de Leví había reverdecido, y echado flores, y arrojado renuevos, y producido almendras". 
(Números 17:8 RVR1960)

Dios quería escoger un ministro y una tribu sacerdotal, pero debía quedar claro a todo el pueblo que era una elección de Dios, entonces cada jefe de tribu debía traer su bastón y Aarón debía representar a Levi. Los doce bastones debían colocarse frente al arca y Dios haría florecer el bastón o vara del elegido.
Una historia tan sencilla como impresionante y hoy Dios nos hablará a través de ella.

La vara puedes ser tu.
Un trozo de palo seco, sin vida, y todos estarán de acuerdo en que esa vara es imposible que florezca, sin embargo Dios puso sus ojos en ella, para decirnos a través de ella que Dios puede y quiere hacer reverdecer nuestras vidas, que lo que hace florecer una vara seca no es la virtud de la vara, sino la elección del Señor, y hoy debes saber que Dios te eligió.

Una vara frente al arca
Es notable que la vara debía ser puesta frente al arca y el arca representa la presencia de Dios, solo la presencia de Dios trae vida y hace dar fruto. Abraham por ejemplo era un "bastón seco", un hombre de edad con una esposa estéril, pero entraron en la presencia del Señor y Dios transforma sus varas. Cuando una vara pierde la conexión con la planta se seca, por eso JESÚS dijo "Yo soy la vid y vosotros los pámpanos, el que permanece en mi y yo en el, este lleva mucho fruto, porque separados de mi nada podéis hacer" (Juan 15/5). 

Flores, renuevos y frutos...
Se dice que la vara reverdeció, pero especifica que fueron flores renuevos y frutos, y estos son como tres niveles de desarrollo desde una vara seca a una plenamente fructífera.
Las flores son el primer nivel y representan la vida, primero la vara debe recibir el soplo de vida, y JESÚS es la vida, él es la flor, por eso también es llamado "rosa de saron o lirio de los valles". La flor representa un verdadero encuentro con JESÚS, pues él puede resucitar lo que esta muerto y hacerlo florecer.
Los renuevos son el segundo nivel y representan nuestro carácter, son esas ramas nuevas y tiernas que van brotando debido a que esa rama esta llena de vida, así también nuestro carácter comienza a reproducir las virtudes de Cristo, su amor y paciencia, su fe y mansedumbre, etc.
Y el fruto son el ultimo nivel y representa los hijos espirituales, aquellos que contienen en si la semilla que permitirá repetir todo el ciclo, sin embargo el fruto es una consecuencia de las flores y los renuevos.

Quisiera ver la cara de esos doce príncipes cuando al día siguiente vieron las varas secas, y al mirar la vara de Aarón gritaron llenos de asombro "! floreció ¡ y hasta tiene fruto". Hoy usted no se asombre pues es una vara elegida por Dios y dará mucho fruto.

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