viernes, 17 de octubre de 2014

LECCIONES DE AMOR

"Y preparó Jehová Dios una calabacera, la cual creció sobre Jonás para que hiciese sombra sobre su cabeza, y le librase de su malestar; y Jonás se alegró grandemente por la calabacera. Pero al venir el alba del día siguiente, Dios preparó un gusano, el cual hirió la calabacera, y se secó. Y aconteció que al salir el sol, preparó Dios un recio viento solano, y el sol hirió a Jonás en la cabeza, y se desmayaba, y deseaba la muerte, diciendo: Mejor sería para mí la muerte que la vida. Entonces dijo Dios a Jonás: ¿Tanto te enojas por la calabacera? Y él respondió: Mucho me enojo, hasta la muerte. Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció"
(Jonás 4:6-10 RVR1960)

La historia usted la conoce, Dios llamó a Jonas para ir a advertir a una ciudad pagana del el juicio de Dios, al principio Jonas no quiso ir y arrancó en un barco, pero terminó en el vientre de un pez tres días, arrepentido clamaba misericordia y Dios le permite ir a Ninive a cumplir su llamado, para sorpresa de Jonas la gente se arrepintió y Jonas tomó palco para ver la destrucción en primera fila, y justo aquí tiene lugar la escena narrada al comienzo.
A mi me parece que esta historia es una muestra del buen humor de Dios, de su infinita paciencia y ternura para enseñarnos y transmitirnos su corazón, imagino la alegría de Jonas cuando creció la calabacera, era su mundo perfecto, una agradable sombra mientras Dios castigaba a los desobedientes, pero Dios le envió un gusano y dañó la planta y se seco, luego salió el sol, y Jonas se desmayaba, pero permanecía ahí para ver el espectáculo, la destrucción de la ciudad; y el juicio no llegaba, eso hizo que se enojara demasiado, hasta deseaba morir.
Esta sencilla historia, que mas parece el berrinche de un niño que un mensaje bíblico, puede dejarnos algunas enseñanzas importantes hoy.

El peligro del olvido
¿No era este el mismo Jonas que hace unos días lloraba arrepentido por una oportunidad desde la oscuridad del vientre de un pez?, y ahora enojado hasta desear su propia muerte, porque Dios no castigaba el pecado de la gente que se había arrepentido por la palabra del mismo profeta. Jonas había conocido en su propia vida la misericordia de Dios, porque Dios revirtió el juicio de muerte contra su vida, escuchó su clamor y lo rescató, ¿qué le pasó a Jonas?, había olvidado la misericordia de Dios.
Dios no usó una calabacera para molestar a Jonas o reírse de él, sino para recordarle a Jonas que es un Dios de misericordia, pues hizo nacer y crecer de la nada una calabacera para cubrirle, por la cual no hizo nada, le fue gratis, y también hizo eso con Ninive, cubrió su pecado sin merecerlo, pero ahora a Jonas le molesta.
Es peligroso olvidar la misericordia de Dios, Jesus dijo "Bienaventurados los misericordiosos porque ellos alcanzarán misericordia" (Mateo 5/7), la pregunta es ¿que pasa con los que no hacen misericordia?, pues no alcanzarán misericordia, Dios quiso ilustrar esto secando la calabacera, quitó su manto de protección, en Lamentaciones 3/22 dice: "Por la misericordia del Señor no hemos sido consumidos", ya entenderá que pasa sin la misericordia del Señor...

Otras ideas 
Jonas tenía sus propias ideas y formas de entender lo que estaba pasando, él veía al pueblo de Ninive como enemigos de Israel, por eso quería el juicio sobre ellos, Jonas creía que Dios se estaba equivocando al levantar o quitar el juicio.
Aveces nos pasa que no entendemos lo que Dios esta haciendo y algunos cegados por sus propias ideas llegan a pensar que Dios se equivocó con ellos, pero la Biblia dice "... él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?" (Daniel 4:35 RVR1960). 
La mayor de las veces nos corresponde aceptar la voluntad de Dios, cuadrar nuestras ideas a las de él, así simplemente entregarnos a su criterio, él sabe lo que hace, como lo hiciera Abraham cuando Dios le pidió a su hijo Isaac, simplemente lo llevó al sacrificio, sin cuestionar, renunciando a sus propias ideas, debemos dejar que él piense por nosotros, sin lugar a dudas lo hace mejor que nosotros.

La prioridad de Dios
Jonas ignoraba que Dios tiene una prioridad y que todo cuanto haga tendrá ese norte; la salvación de la gente, Dios había enviado a Jonas a Ninive no para condenarles, sino para darles una oportunidad. Jonas no tenía compasión por la gente de esa ciudad, era indiferente a su necesidad de salvación.
Dios es justo y no se alegra en castigar a los rebeldes, se goza en ver corazones arrepentidos, en restaurarles y hacerles renacer, porque las misericordias del Señor son para todos.
Hoy tenemos que hacer de la prioridad de Dios nuestra propia prioridad, dedicar todos nuestros esfuerzos en la salvación de nuestra generación, quitar la indiferencia y comprometernos con la redención de nuestra nación.

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